Laura Bueno Medina

Tijuana.- El arzobispo Francisco Moreno Barrón, a nombre de la Iglesia católica, ofreció el perdón a los asesinos o asesino del padre Ícmar Arturo Orta; no obstante, dijo, debe haber arrepentimiento de corazón para que haya una verdadera conversión de la persona que causó un daño irreparable.

“A quienes perpetraron este crimen, les hago un llamado; tomen conciencia de la gravedad de su delito. Ustedes valen mucho porque salieron de las manos de Dios a través del amor de sus papás. Dios les ama y anhela su conversión, su cambio”, dijo el arzobispo exhortando a los malhechores a arrepentirse de corazón.

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Aclaró que el que se exprese el perdón por parte de la Iglesia no significa que no se pedirá justicia sobre el asesinato del sacerdote.

Asimismo, aclaró que no corresponde a la Iglesia o a la arquidiócesis de Tijuana hacer investigaciones ni hacer justicia.

Son las autoridades competentes quienes harán las investigaciones y aplicarán la ley de la justicia. “Por eso, yo hago un llamado a las autoridades para que esclarezcan este crimen y a que aplicando la ley, hagan justicia”. A unir esfuerzos para construir la paz exhortó el arzobispo a toda la comunidad de la región.

Lo anterior, para combatir la descomposición social que existe en grupos de la sociedad que está afectado a toda la ciudadanía y causando mucho dolor.

En su mensaje, el arzobispo invitó a la reflexión de que, “la vida es un don de dios. Nadie es dueño de su vida. Dios nos la ha confiado para que la administremos. Nosotros vamos a dar cuenta de nuestra vida a dios; por lo tanto, nadie puede disponer de su propia vida arbitrariamente, y, desde luego, nadie puede atentar contra la vida de otra persona. La vida es sagrada. La vida humana merece respeto”.

El arzobispo metropolitano, Francisco Moreno Barrón, estuvo acompañado por el vicario general, Israel Ángeles Gil, y el secretario canciller, José Velasco Arias, previo a las honras fúnebres del Ícmar Arturo Orta.

Dios les ama y anhela su conversión, su cambio

Francisco Moreno, arzobispo metropolitano