Crisstian Villicaña
Tijuana.- El trastorno del espectro autista (TEA) es un grupo de afecciones que afectan el comportamiento social, la comunicación, el lenguaje, entre otros. La detección temprana de este trastorno es fundamental para ayuda a que los niños trabajen los aspectos de los que más adolecen.
Valeria Gómez, presidenta de Voz del Autismo AC, señaló: "Lo principal es hacer un diagnóstico oportuno. Nosotros vemos cada vez más niños diagnosticados; lo que no sabemos y tenemos que descartar es a niños que traen un mal diagnóstico, que se le(s) diagnostica con autismo y no lo tienen. Haciendo un diagnóstico temprano, tenemos la posibilidad de tener al niño en terapia, y, con esto, el niño avanza muchísimo. Hay que recordar que no se quita el autismo, no es una enfermedad que se va a quitar; más bien vamos a mejorar la calidad de vida del pequeño. Entre más temprano, más se puede adaptar al niño pudiendo tener en ocasiones algunas oportunidades de incorporarse a la parte académica; y los que no, trabajar para que tengan una calidad de vida, que pueda valerse por sí mismo", subrayó.
Según informes de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en los últimos 50 años la prevalencia mundial de este trastorno parece ir en aumento. Las evidencias científica señalan que la existencia de múltiples factores tanto genéticos y ambientales hacen más probables que un niño padezca TEA.
"Va (a) haber niños que desafortunadamente no nos hablan por más que reciban sus terapias desde temprana edad; muchos no desarrollan lenguaje, pero otros si tienen la oportunidad. Ahí básicamente el niño nos va ir diciendo qué es lo que puede ser capaz de hacer. Creo que sería no limitarlos; lo que hay que proporcionarle al niño es todo un abanico de terapias de oportunidades, y ellos mismos va(n) (a) ir dando las pautas en lo que van a poder hacer", concluyó.