Tijuana.- Desde 2020 y 2021, periodo más crítico de la pandemia por Covid-19, hubo un alto incremento en el precio de los materiales requeridos para la construcción de viviendas, esto ha provocado que las clases con menores recursos vean más lejana la posibilidad de adquirir una vivienda digna, indicó Jesús Octavio Rincón Vargas, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción delegación Tijuana (CMIC).
“Es muy triste lo que está pasando porque las clases pudientes pueden seguir comprando vivienda cara. Las personas con escasos recursos cada vez ven más retiradas sus posibilidades de adquirir una vivienda digna, ya no hay viviendas de 500 a 600 mil pesos, no dan los precios por el valor de la tierra y los materiales”, explicó.
Rincón Vargas explicó que este 2022 la inflación en los materiales de construcción no ha sido tan alta, sin embargo, durante 2020 y 2021 en promedio los precios de los materiales subieron por encima de 50%.
“Este 2022 el concreto ha subido un 8%, el acero ha subido un 4% a 5%. La madera durante el periodo de la pandemia subió un 30%, este 2022 la madera subió un 7%”, agregó.
El presidente de la CMIC detalló que esta situación es grave, pues la inflación de este 2022 se suma a la misma de los pasados 2020 y 2021, lo que provoca que el costo de las construcciones aumente.
No sólo los materiales han tenido un incremento considerable, pues también la mano de obra en la industria de la construcción en Tijuana ha escaseado como consecuencia del gran número de construcciones de turismo médico, viviendas verticales, parques industriales, naves industriales, adecuaciones industriales, turismo gastronómico, desarrollos comerciales y viviendas medias.
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“Debemos mandar a pedir gente del centro de la República de estados como Oaxaca, Tlaxcala, Puebla y Veracruz, son estados donde nos nutrimos de la mano de obra en Tijuana. Llegan y debemos pagarles bien, desde transporte, estancia, comida, etc”, agregó.
La mano de obra, señaló Rincón Vargas, representa un 35% al 40% del valor de la obra, y esta incrementa de 10% a 15% de manera anual.
“Lo que es transporte, alimentación y estancia es un 3% a 4% adicional al porcentaje de los sueldos”, finalizó.
