Erika Gallego/La Voz de la Frontera
Mexicali.- Hace dos semanas el Comité Internacional para la Recuperación de la vaquita marina reportó el avistamiento de seis ejemplares en las aguas del Alto Golfo de California, el hábitat natural del único cetáceo 100% mexicano que además está en crítico riesgo de extinguirse.
Tras observarlas, personal de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), de la Secretaría de Marina, integrantes de la organización Sea Shepherd, del Museo de la Ballena y Ciencias del Mar así como de la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS) dijeron tener confianza en que la especie va a recuperarse. Salvador Galindo Bect, investigador de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), dedicado al tema de la vaquita marina durante las últimas décadas, opina lo contrario, pues considera que no hay elementos que realmente propicien la recuperación del único mamífero marino que tiene México. Aunque el Gobierno federal también presume esperanzas, el catedrático alerta que la especie está destinada a desaparecer, pues con tan pocos ejemplares no se tiene variabilidad a nivel genético.
“Para poder subsistir el organismo requiere variabilidad genética, si no hay queda expuesto a los cambios ambientales y la mortalidad se incrementa fácilmente, en el caso de vaquita marina ya no hay variabilidad, no tiene futuro biológicamente”. Otro aspecto en contra es la falta de una estrategia realmente efectiva para la protección de la especie considerada como una víctima colateral del tráfico de totoaba, otra especie protegida y endémica del Mar de Cortés. El investigador y catedrático considera que este tema ha sido visto únicamente como un problema pesquero cuando en realidad va más allá e involucra a otros países como China, principal comprador del buche de totoaba así como Estados Unidos por donde transitan dichos órganos.
“Se ha satanizado a los pescadores y se ha culpado al Gobierno de no poner solución al problema y vienen las agresiones internacionales como embargar los productos pesqueros, México tiene que defenderse y es un asunto de Relaciones Exteriores no solo ambiental”. Galindo Bect señaló además que las autoridades federales no estén tomando en cuenta a la academia mexicana donde también hay datos que pueden aportar para conformar una estrategia que atienda el tema de la vaquita marina desde todas sus perspectivas.
El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por su sigla en inglés) urgió hoy al Gobierno mexicano a redoblar los esfuerzos para asegurar un Alto Golfo de California libre de redes de enmalle y proteger así el hábitat de la vaquita marina. La vaquita marina es una especie de la que se calcula una población de 30 ejemplares, que en su edad adulta llega a medir 1.50 metros, alcanza un peso de 30 kilogramos y es sumamente nerviosa, por lo que el cuidado debe ser extremo, explicó.