Autoridades municipales lograron un acercamiento entre vecinos del fraccionamiento Jardín Dorado con representantes de las empresas Consumidora Industrial Otay e Igasamex sobre el bulevar Terán Terán, pero solo lograron que los colonos corroboraran que continuarán obstaculizando la instalación del gasoducto por considerarlo un riesgo para sus vidas y su patrimonio.
Aún cuando cuentan con permisos de los tres órdenes de gobierno, la obra no fue socializada y carece de la anuencia de los vecinos, señaló Saúl Zamudio, uno de los líderes de los vecinos.
Compartió que al mediodía del pasado lunes se reunieron en Palacio Municipal con funcionarios del XXIV Ayuntamiento de Tijuana, encabezados por el secretario del Gobierno, Jorge Salazar Miramontes, y representantes de las empresas que abren las calles de Jardín Dorado para instalar la tubería de un gasoducto.
En la reunión los vecinos reclamaron por qué no fueron consultados antes de iniciar la instalación de la obra, y el argumento de los representantes de las empresas fue que no lograron localizar a ningún dirigente de colonos, “lo cual no es creíble”, subrayó.
Para Saúl Zamudio es incongruente que las autoridades municipales hayan otorgado los permisos para instalar en el gasoducto sin considerar la opinión de los vecinos, cuando un año atrás la obra fue suspendida por la oposición de los propios colonos.
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Anotó que en la reunión las autoridades municipales se comprometieron a realizar la noche de este martes un recorrido en el lugar en donde se instala la obra, comprometiéndose la empresa a no avanzar en los trabajos de instalación del gasoducto hasta que se realice esta inspección.
Relató que es durante la noche y madrugada cuando se realiza el corte de concreto de vialidades y banquetas de ese asentamiento, para dar continuidad a la colocación de la tubería del gasoducto, por lo que los habitantes del lugar se han organizado en guardias, para obstaculizar la continuidad del proyecto.
A pesar de la resistencia de los vecinos, el proyecto ha logrado avanzar sobre el bulevar Terán Terán, instalándose la tubería por la que se suministrará gas natural a escasos metros de planteles educativos, expendios de gasolina y viviendas.
“Hemos sido agredidos por los trabajadores y encargados de la obra, pero eso no nos amedrenta, por el contrario, seguiremos obstaculizado la instalación del gasoducto en la medida de nuestras posibilidades, porque sabemos el peligro que representa, sobre todo por lo inestable de la topografía de Tijuana”, acotó Zamudio.