Mexicali.- La corrupción impera no solo en las policías municipales, sino también en los ministerios públicos tanto estatales como federales, ya que en lugar de buscar la manera de vincular a proceso a un delincuente, lo primero que le preguntan es ¿traes dinero?, para ver la forma en la que te podemos ayudar.
Así lo afirmó el secretario técnico de la Mesa de Seguridad de Baja California, Isaías Bertín Sandoval, al señalar que a pesar que se han reducido delitos como el robo de vehículos y el de casa habitación, la gente no lo valora.
Asegura también que se han reducido el número de homicidios en 11% en el estado, sin embargo, por ser la cifra tan alta, este avance es apenas perceptible para los bajacalifornianos.
Expuso que son 3 las principales causas de la violencia en Baja California, y que han puesto a Tijuana en el epicentro de la delincuencia en el estado, que son la corrupción, la falta de profesionalización de las policías municipales, y la falta de voluntad de los diputados federales para reformar leyes.
Es decir, cuando se detiene a una persona, y trae un IPH (Informe Policial Homologado), que no se llena bien, cuando hay un homicidio, los primeros que llegan son los policías municipales, ya que siempre son más, descrito.
“Si tú llegas a la escena del crimen, y ese informe policial no lo sustentas, no lo llenas de manera adecuada, no pones dónde, cuándo, cómo, en qué circunstancias, no le anexas actas de entrevistas a los testigos, si era una persona robusta, chaparrita, alta, todo eso se tiene que anexar.
“Pero si tú llegas y lo hacer al ahí se va, o lo haces con carencia de conocimiento, inclusive deteniendo al delincuente, lo llevas, lo pones a disposición carente de todo esto, lógicamente esto va a estar libre, sin contar la corrupción que impera en las policías y ministerios públicos.
También pasa que si el policía se topa con un crimen a la hora en la que está por terminar su turno, este no lo atiende, ya que implica horas de papeleo que implican más trabajo, en el que por cierto, no le pagan las horas extras.
En el caso de los ministerios públicos, en lugar de pensar de cómo vincular a proceso a un delincuente, “lo primero que le pregunta a este es ¿traes dinero ?, y vemos la forma en cómo te ayudo”, esa es la corrupción que impera en estos.
Bertín Sandoval mencionó que en el caso de la policía de Tijuana, estos tienen elementos que carecen de preparación, ya que pasan de ser policías comerciales, a policías de calle.
Es decir, un policía comercial es el equivalente a un guardia de seguridad, pero bajo el criterio del secretario de Seguridad Pública, pasan a ser policías de calle, sin haber pasado por el entrenamiento de la academia, y por supuesto, sin pasar por los controles de seguridad y confianza.
Mientras que en el caso de los diputados federales, a estos les ha faltado voluntad política para realizar los cambios a las leyes para fortalecer la seguridad pública.
Es decir, al momento hay muchas conductas que quedaron fuera de los delitos considerados graves y que ya no contemplan la prisión preventiva como medida cautelar, aseguró el funcionario federal.
El sistema de justicia penal adversarial no está adecuado a la realidad en México, ya que al momento en el que se deja libre a un primo delincuente (persona que comete un delito por primera vez), este no lo ve como una nueva oportunidad.
Es decir, esta persona piensa que se ha salido con la suya y ha burlado al sistema de justicia, de inmediato regresa a sus actividades delincuenciales habituales, aseguró Bertín Sandoval.