Largas jornadas de estudiantes de medicina afectan salud mental

Las jornadas de más de 24 horas aumentan los niveles de estrés, ansiedad y depresión

Giovanny Urenda | El Sol de Tijuana

  · sábado 21 de agosto de 2021

Algunos estudiantes han sufrido trastornos mentales. Foto: José Luis Camarillo | El Sol de Tijuana

Tijuana.- Los estudiantes de Medicina que llevan a cabo su internado, que abarca un año, realizan jornadas que superan las 24 horas, lo cual provoca altos niveles de estrés, ansiedad y depresión, además de las afectaciones de salud que sufren los estudiantes de la salud, también se debe tomar en cuenta que hasta ciertas instancias se encargan de dar atención a la mayoría de los pacientes que acuden a los diversos centro de salud.

El doctor Guadalupe Bustamente Moreno, director del Hospital de Salud Mental de Tijuana A.C., indicó que han recibido un gran número de casos particularmente de estudiantes de Medicina que deben ser internados debido a diferentes trastornos mentales.

“Estos estudiantes son gente muy joven, el agotamiento después de ocho horas va agobiando, necesitan además más tiempo para estudiar y fortalecer la enseñanza, pues un estudiante también debe estudiar todo lo que aprendió y memorizarlo para realizar su especialidad. Hay que recordar que existe el síndrome de Burnout, que marca un cansancio físico en el área medida por el abuso de los horarios y sobre todo cuando viven dentro del hospital”, indicó.

Con la reforma la CESPT pasaría al Ayuntamiento de Tijuana. Foto: Carlos Luna | El Sol de Tijuana

Bustamante Moreno señaló que en el Hospital de Salud Mental han recibido diversos casos específicos de estudiantes de Medicina con trastornos mentales que incluso ponen en peligro su propia vida.

“Hemos tenido estudiantes de diferentes universidades hospitalizados en el área del Hospital de Salud Mental, con estados fuertes depresivos e ideación o con intentos suicidas. Esto es consecuencia quizás porque la carga de trabajo no pudo ser asimilada y tienen un cansancio ‘Bourneados’, entonces tiene problemas psicológicos o psiquiátricos”, explicó.

En la opinión del director, la Secretaría de Salud del gobierno federal, debe analizar cómo se llevan a cabo estas largas jornadas de internado, que como consecuencia tiene afectaciones en los jóvenes aspirantes a la medicina, concluyó Bustamante Moreno.

“Hasta el momento no se ha planteado, ni cuando fui secretario de Salud lo escuché, ni hasta hoy lo he escuchado, todo dependerá de los programas de enseñanza de cada institución, unas pueden ser más flexibles y otras más estrictas. Cuando es más complicado es cuando van a las rancherías, pues no se cuenta con un servicio de salud completo, entonces deben entrarle a todo lo que se va presentando (...) Esto sería un análisis que debe hacer la Secretaría de Salud federal, de enviar a los estudiantes a prácticas o internados revisando los estudios que van a hacer y por cuantas horas, antes eran horarios más extensos”, agregó.

Por otra parte, Rodolfo Rodríguez (nombre modificado), médico pasante en servicio social, habló de su experiencia en el periodo de internado, donde también explicó en qué consistió su trabajo como estudiante interno.

“Sales de la carrera de medicina de los 10 semestres académicos, una vez que egresas inicias un año que se divide en seis servicios: en cirugía, psiquiatría, pediatría, ginecología, urgencias, medicina familiar y medicina interna, dos meses cada servicio, en cada servicio haces diferentes actividades”, explicó.

Foto: José Luis Camarillo | El Sol de Tijuana

Durante su internado en la especialidad de urgencias, se presentó la pandemia por Covid-19, por lo que debió brindar un servicio completo sustituyendo al médico profesional que acompañaba, pues se enfocó en los casos de la nueva enfermedad.

“En el servicio de urgencias, en mi caso me tocó un hospital pequeño durante el periodo de noviembre y diciembre, cuando hubo un repunte de casos de Covid, el Hospital General se llenó y el hospital de Tecate también se llenó, el doctor a cargo se enfocó solo de casos Covid- 19, por lo que me correspondió estar a cargo del servicio, nunca me tocó algún caso extremo”, indicó.

Al cambiar del Hospital General de Tecate al Hospital General de Tijuana, Rodríguez notó un cambio, pues los horarios de sus periodos de internado se modificaron considerablemente, pero afirmó que los médicos a cargo mostraban su apoyo permitiéndole dormir en pequeños lapsos.

Foto: Carlos Luna | El Sol de Tijuana

“Posteriormente nos reacomodaron en el Hospital General de Tijuana, en donde los días de guardia abarcaban un horario de 7 am y salía a las 4 de la tarde del día siguiente. Pero como se trataba de un servicio más tranquilo estaba permitido dormir en lapsos nocturnos. No me lo prohibían los doctores, me tocó mucha conciencia de su part e(...) En el Hospital General de Tijuana, en oncología pediátrica tuve mis jornadas más extensas. Durante el periodo de urgencias no dormía nada, era el único interno, eran 25 horas seguidas”, afirmó.

A pesar de brindar sus servicios por un largo periodo, el pago que recibía durante su internado era muy mínimo, y expresó que gracias al apoyo de sus padres de familia pudo solventar sus gastos necesarios para continuar con sus estudios.

“Me pagaban 935 pesos a la quincena, no podía cubrir mis gastos. Tuve la fortuna de contar con el apoyo económico de mis padres. Algunos compañeros su apoyo era mínimo y además debían trabajar por fuera. Cuando terminaba mi jornada regresaba a mi casa por carretera con desvelo, el gasto de gasolina era de 200 pesos por viaje”, dijo.

Rodolfo Rodríguez explicó cómo fue realizar su internado médico en el periodo de pandemia por Covid-19, desde la falta de vacunación hasta la prohibición de atender a pacientes infectados.

“En el mes de marzo retiraron a todos los internos debido a la pandemia de Covid-19, en julio comencé mi internado, estuve 8 meses en el hospital General de Tecate, los otros

4 fue cambiado al Hospital General de Tijuana, pero teníamos prohibido atender pacientes Covid-19, eso lo agradezco mucho (...) Insistimos en que nos brindarán la vacuna mientras realizamos nuestro internado en el Hospital General de Tijuana, pero en otro Hospital, fuera de la ciudad, nos incluyeron en su lista como si fuéramos internos de ese lugar, por lo que recibimos nuestra vacuna”, concluyó.