TIjuana.- Según detalla el portal del gobierno de México del 2018 al 2023 se instalarán 43 mil antenas base como parte del proceso de mejorar la cobertura, precio y calidad en servicios de telefonía e internet, sin embargo, la proliferación de éstas ha generado dudas en la población en torno a los posibles daños a la salud causadas por las radiofrecuencias de las también llamadas radio bases.
Existe la idea de que habitar cerca de una antena base es sinónimo de afectaciones a mujeres embarazadas y en general a la población, al punto que ha habido casos donde vecinos se han opuesto a la instalación de una radio base por temor.
El médico Francisco Orozco Ruiz nos brindó una entrevista donde nos habla con claridad sobre las diferentes radiaciones que hay y cómo es que actúan en los tejidos del cuerpo humano.
¿Son en realidad riesgosas para la salud las antenas base?
“Tal vez viene desde la palabra radiación por lo que la gente entiende o lo asocia con cáncer, pero hay varios tipos de radiación, está la radiación ultravioleta que es la que genera el sol, la radiación por luz infrarroja, por microondas que son las que se utilizan en telecomunicaciones como celular, ondas de radio, rayos gama y la radiación ionizante, ésta última es la que genera problemas a la salud o lo que genera complicaciones agudas o crónicas por exposición a radiación”.
“La radiación electromagnética realmente no nos afecta en nada en la salud, puesto que son ondas de mayor tamaño que no interfieren en nuestras células; realmente no hay riesgo. La única que genera ese tipo de daños sería por exposición larga o en cantidad sería rayos x, rayos gama o radiación ionizante, que son las que generan los isotopos radiactivos como el uranio, el plutonio o cualquier elemento de la tabla en su versión inestable o radiactiva; son ondas muy pequeñas que penetran en la célula o penetran en el núcleo de las células dañando el material genético y evitando que haya una reproducción adecuada de la célula”.
Ciudadanos y miembros de medicina alternativa como osteópatas mencionan que es peligroso el uso de celular, incluso recomiendan hacer uso de bandas o dispositivos que funcionen como supuestos escudos de radiación ¿qué opinión le merece esto?
“No es nada demostrable científicamente, un osteópata en realidad no es un profesional de la salud como tal, su ramo en realidad no tiene sustentación científica; hay muchos artículos que hablan de la osteopatía como una rama de la medicina, pero en realidad no lo es, entonces ahí te mezcla mitos con realidades o acomoda a la realidad a favor de su rama”.
“Muchas cosas de los que utilizan ellos realmente no tienen ningún tipo de valor científico, incluyendo esas bandas, la utilización de ellas es una moda que realmente una ayuda, un alivio a contener la radiación electromagnética; si contuvieran estas bandas la radiación electromagnética no tendríamos luz visible o comunicaciones porque interferiría efectivamente con ellas”.
El médico menciona que en la actualidad no existen casos documentados de personas que hayan enfermado por exposición a radiofrecuencias, incluso el portal del gobierno México indica que la Comisión Internacional de Protección de Radiación no Ionizante (ICNIRP por sus siglas en inglés) revisó estudios epidemiológicos de 1974 a 2004 en torno a la exposición, población, cáncer, efectos reproductivos y enfermedades cardiovasculares causados por radiofrecuencias, encontrando que por el momento no hay evidencia contundente que demuestre efectos adversos.
LA PROLIFERACIÓN DE ANTENAS
Como se comentó al inicio del texto la proliferación de antenas a las afueras e interior de las ciudades es una realidad que se irá incrementando con el pasar de los años, razón por la cual algunos expertos en el tema consideran necesario estar optimizando los reglamentos con miras a contar con apropiadas instalaciones de radio bases.
Román Caso, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (Canieti), señaló al respecto. “Con el tiempo hemos visto que hay más radio bases en una ciudad por la cantidad de usuarios, por la densidad que se aglomera en una zona o en ciertas zonas de la ciudad y para efectos de dar el servicio, cobertura y cumplir con los compromisos de una empresa responsable para quienes pagan esos servicios, pues instalan e instalan”.
“El consejo es que la autoridad se reúna con la industria, en este caso con los miembros del sector de telecomunicaciones y dialoguen, entablen una comunicación para dar entendimiento de qué hay el día de hoy y hacía dónde van las cosas porque cada 36 meses cambia; es sano revisar reglamentos de esta naturaleza que competen a una industria tan cambiante que se renueva cada cierto tiempo prácticamente, para que sepamos si estás radio bases y los equipos cumplen con las NOM (Normas Oficiales Mexicanas)”.
Los criterios y características de ubicación de una antena, así como las obligaciones que deben cumplir los particulares son competencia de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), mientras que las autoridades municipales son las encargadas de la autorización, permiso de uso de suelo, construcción e instalación de antenas.
Dentro de la ciudadanía siguen persistiendo dudas sobre los alcances del Reglamento para la Construcción, Instalación y Conservación de Estaciones Terrenas y Estructuras de Telecomunicaciones de Tijuana, por ello, se entrevistó a Patricia Peterson Villalobos, secretaría de Desarrollo Territorial, Urbano y Ambiental de Tijuana.
¿Cuáles son algunas de las limitantes para instalar una antena?
“Se limitan distancias por el uso de suelo, distancias a zonas escolares y zonas habitacionales, si hay una distancia determinada, no es mucha la distancia, pero también depende mucho del tipo de antena, porque con la tecnología las antenas han estado cambiando, antes eran grandes y con más radiación, complicadas o complejas y cada vez las hacen más chicas y más sencillas y con menos repercusiones a la salud”.
Ha habido casos en Tijuana donde vecinos se han negado a la instalación de una estación base; como ocurrió en la colonia El Florido durante el 2017. En esa ocasión se evitó que se concretara el proyecto por lo que le cuestionamos a Peterson Villalobos si la negativa de la ciudadanía es suficiente para cancelar una instalación.
“No, más bien se hace un dictamen urbano, técnico, para ver si es procedente que se pueda instalar, es algo similar como un edificio de 20 niveles, se hace un estudio de su impacto urbano, ambiental, en este caso vial no porque no repercute, pero se hace su análisis y si es factible su instalación, procede, no hay una limitante todavía en reglamentos que nos diga si un vecino se opone no se pueden hacer cosas, porque también prevalece el derecho del ciudadano propietario”.
“Si se debe tomar en cuenta la opinión, por supuesto y nosotros gobierno debemos considerarlo, pero no es determinante para decir sí o no, si todo lo demás es factible y sobre todo si pensamos que la radiocomunicación es una necesidad de la población, no es de una persona o de un grupo específico, sino que toda la población requiere del servicio”.
En la actualidad hay registradas poco más de 600 antenas de diferentes tipos en la ciudad, al mismo tiempo, agrega la secretaría de Desarrollo Territorial, Urbano y Ambiental, hay constantes peticiones para instalarlas.
Así mismo, concluyó diciendo que en la vigente administración se encuentra regularizando a las antenas que no están en orden legal. “Tenemos muchos casos de regularización porque por décadas las instalaban y no pedían permiso y ahorita tenemos muchos casos de regularización de antenas que tienen siete o 10 años instaladas y que se están sumando a nuestro registro”.
“Las 600 y fracción que tenemos registradas son por los registros de lo que vemos o lo que tenemos en archivo de lo que se sacó permiso en su momento, pero si tenemos conocimiento de que hay otras más que no tenemos registradas; entre un 20 y 30% (de las 600)”.
ZONAS PROHIBIDAS PARA TELECOMUNICACIONES
Dentro de un radio de 170 metros a partir de los monumentos públicos y sitios de valor histórico y estético
Banquetas, andadores, arroyos de las calles, camellones, glorietas, plazas públicas, áreas verdes y en general todos los accesos públicos que se encuentren definidos como tales por la ley
A menos de treinta metros de distancia con relación a una línea de transmisión y distribución de energía eléctrica
Los remates visuales de las calles, las fachadas laterales de los inmuebles sin frente a la vía pública, y en aquellos sitios que obstruyan o desvirtúen la apreciación de hitos, el paisaje urbano y el natural.