El mirador principal que forma parte de la primera etapa del Ecoparque Esperanto estará terminado a finales del próximo mes, dijo Porfirio Vargas Santiago, subsecretario de la Secretaría de Reordenación Territorial y de Desarrollo Urbano de la (SIDURT).
Ubicado en la entrada principal, desde donde los visitantes tendrán una vista panorámica de las 340 hectáreas entre el vaso de la presa Abelardo L. Rodríguez y las 133 hectáreas a reforestar, lleva un avance del 84%.
Aunque el gobierno del estado anunció en noviembre de 2022 que el mirador estaría listo en marzo de este año, tuvo un desfase en el proceso de la obra a causa de las constantes lluvias de la temporada invernal, indicó Porfirio Vargas.
De acuerdo con datos consultados en la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT), el mirador está a cargo del arquitecto Erick Alcantar Martínez y tendrá un costo de seis millones 992 mil pesos.
Esta primera etapa también contempla un andador de dos kilómetros, dos puentes peatonales, dos pabellones, una tirolesa, juegos infantiles, una ciclovía de dos kilómetros, la reforestación en general y un sistema de riego.
Además de juegos infantiles, un área de toboganes y un espacio para practicar bicicross, todo con una inversión de 95 millones de pesos que debe concluir este mismo año.
“El parque sería un referente para la ciudad y el estado, no tenemos un espacio público de estás dimensiones”, destacó Porfirio Vargas Santiago.
Esperan no solo a visitantes locales sino también a extranjeros porque será una atracción turística con actividades acuáticas en el vaso de la presa, como canotaje y Kayak, adelantó.
A pesar de ser una obra en proceso con apenas algunos avances, el espacio ya es visitado para actividades como canotaje, pesca, paseos en bicicleta y motocicleta, o simplemente para pasar el rato, según observó El Sol de Tijuana durante un recorrido.
Ante la escasa lluvia de años anteriores que redujo drásticamente los niveles de agua en la presa, el espacio se usaba para competencias de automóviles 4x4, también fue escenario de diversos delitos e incluso muertes.
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EL PROYECTO EMPEZÓ CON EL PIE IZQUIERDO
En febrero de este año ocurrió un deslave de tierra que dañó el área de juegos del jardín de niños Josefa Ortíz de Domínguez, a un costado del sitio donde se construye el mirador.
Una de las maestras que habló con la condición de no dar su nombre, dijo que la afectación molestó a las madres de familia.
“El deslave fue provocado por la empresa constructora, pero ya reparó el daño, puso un muro de contención, y nos rehabilitó el área de juegos”, contó.
La maestra además externó su preocupación porque una vez funcionado el Ecoparque Esperanto, las calles por las que se mueven sus estudiantes se saturen de automóviles.
Porfirio Vargas Santiago, subsecretario de la SIDURT, aseguró que el proyecto contempla dos estacionamientos, además de dos accesos de entrada y salida: uno en el vaso de la presa y otro en la parte sureste.
LA REFORESTACIÓN
En los últimos siete meses han sido sembradas 17 mil plantas nativas en los taludes a las orillas del futuro parque, y cuenta con un sistema de goteo producto de una inversión entre el gobierno del estado y el patrocinio de la empresa Coca-Cola.
Octavio López Coronel, encargado de la reforestación del Ecoparque, explicó que en Baja California la sobrevivencia de los árboles plantados después de un año es de tan solo 4.6%, de acuerdo con la Comisión Nacional Forestal.
“Buscamos una sobrevivencia del 80% entre lo que plantamos, por eso estamos constantemente replantando, porque no sabes si te van a caer topos, personas con motos, cosas así”, comentó el también director de Nación Verde A.C.
Pero en las zonas de reforestación aún hay maleza, cercos caídos, escombro y basura, a pesar de que hay letreros advirtiendo que el cerco es para proteger la flora nativa.
“Evitemos que el ganado se coma los árboles que estamos plantando”, dicen los mensajes.
“Se nos estuvieron metieron las vacas, los chivos, los borregos, las cuatrimotos 4x4, por eso le metimos un cerco y estamos replantando constantemente”, mencionó Octavio López.
A pesar de estas adversidades, se dice optimista porque la mayoría de las plantas están creciendo y con el replantado espera que logren crecer y sobrevivir hasta un 90% de los ejemplares.
Sin embargo, esto se sabrá hasta que pase un año que se cumple en diciembre porque en ese mes de 2022 fueron sembradas las primeras 10 mil plantas nativas, dijo el director de Nación Verde A.C.
En cambio el crecimiento de un mezquite, que tiene una vida de 130 años, podría ser visible hasta dentro de cuatro o cinco años, agregó.
“Sé que los gobiernos quieren árboles exóticos, vistosos para la próxima elección, pero hay que pensar primero en la próxima generación”, mencionó Octavio López.
Entre las plantas nativas que formarán parte de la forestación del Ecoparque Esperanto, además del mezquite, están la artemisia californica, eufemia y otras.
Dijo que optaron por planta nativa para dar vida a la biodiversidad de la zona donde la fauna incluye correcaminos, conejos, pájaros, golondrinas, halcones y toda una cadena alimentaria que en estos momentos no tiene un hábitat.
También se plantarán nueve mil árboles, entre ellos frutales, que en estos momentos están en el vivero del parque Morelos en espera de una plataforma para ser sembrados.
Sobre la maleza junto a las plantas nativas, dijo que se trata de vegetación secundaria y por lo regular surge cuando un terreno ha sufrido degradación, así que prevalece sobre la vegetación primaria.
“Vamos a empezar a quitar todo ese pasto seco en unas dos semanas, porque nos da miedo que alguien encienda algo y se nos prenda todo, existe esa posibilidad, aunque tengamos el sistema de riego por goteo”, dijo.
Frente a las letras gigantes con el nombre del Esperanto fue instalado un sistema de riego para mantener el césped, pero fue robado en dos ocasiones, por lo que hoy luce seco.
“Ya van a meter un sistema de riego subterráneo a todo el pasto, además con ese sistema se ahorra agua porque no se evapora”, mencionó el director de Nación Verde.
Dijo que esa asociación está buscando cómo mantener vigilancia las 24 horas del día con la participación de los mismos ciudadanos de la zona.
“De que esto va a funcionar, va a funcionar, te garantizó que tendremos un bosque en tres años”, aseguró.
Mónica Juliana Vega Aguirre, titular de la Secretaría del Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable, dijo que la reforestación de lo que será el pulmón más importante de Tijuana tiene un avance del 50%.
Y avanzará según se desarrollen los trabajos de construcción del ecoparque para no tener después que reubicar los árboles, añadió.
“El 30% son de árboles frutales y el 70% endémicos, todo esto para que se requiera el agua menos posible y el desarrollo de la biodiversidad del lugar” (sic), señaló.
EL PROYECTO NO FUE SOCIALIZADO, ASEGURAN VECINOS
Residentes de los alrededores dijeron que no tienen detalles acerca del Ecoparque Esperanto, solo conocen lo que han visto en medios de comunicación y ninguna autoridad se acercó a informarles.
“Sí está bien hacer un parque, nada más que no se sabe bien lo qué están haciendo, cómo lo van hacer, qué es lo que van a realizar”, señaló América Amanda López.
Y Yordais Gómez, madre de un niño que estudia en el jardín de niños Josefa Ortíz de Domínguez, coincide con los docentes en la preocupación de que aumenté el flujo de vehículos.
“Esa calle (Hermosillo) siempre es muy tranquila, la seguridad de los niños es la parte que me preocuparía a mí, como mamá”, indicó Yordais.
Pero si la autoridad cumple con los estacionamientos suficientes, agregó, es favorable que se aproveche la zona para el disfrute de las familias.
El proyecto completo contempla un segundo mirador al nivel del vaso de la presa, un pabellón de arte, la extensión del andador, ampliar la ciclovía a cinco kilómetros, un área para actividades de senderismo, entres otros atractivos.
La construcción del Ecoparque Esperanto consta de cinco cinco etapas y el programa contempla que cada una esté lista en 12 meses, por lo que concluiría en cinco años, explicó Porfirio Vargas.
