Laura Bueno Medina
Tijuana.- Alrededor de 80% de las mujeres que sufre violencia doméstica o de pareja son madres de familia, lo que deriva en problemas familiares, en los que la mujer debe asumir la manutención de los hijos.
Se estima que, de las mujeres que tienen un empleo formal, 30% son madres solteras; no obstante, hay miles de mujeres en la ciudad que tienen un trabajo informal, que igualmente es el único ingreso que tienen para mantener a sus hijos.
La violencia económica, asociada a la falta de pago de una pensión alimenticia a los hijos, es el tercer tipo de violencia que más sufren las mujeres, de acuerdo a los datos del Instituto Municipal de la Mujer.
En materia de salud, la mujer -por costumbre, falta de información, tiempo o dinero- es la última que acude al médico a pesar de tener malestares constantes; por lo que, en casos de enfermedades graves, se enfrentan a diagnósticos tardíos que no permiten ofrecerles un tratamiento no agresivo en enfermedades, como algún tipo de cáncer.
La doctora Maritza López, responsable del programa de salud reproductiva de la mujer, detalló que las mujeres que presentan una lesión tumoral llegan con al menos seis meses de evolución, lo que no es buena señal para un pronóstico favorable.
En el otro extremo de la vida están las madres adultas mayores, que se encuentran abandonadas por los hijos, y, en el mejor se los casos, con un apoyo asistencial; sin embargo, la cantidad de ellas que están situación de calle o teniendo que trabajar, a pesar de ya ser mayores, es preocupante.