Laura Bueno Medina
Tijuana.- El cáncer de ovario es el tercer tipo de cáncer con mayor mortalidad en el país debido a que es casi imposible detectarlo en etapas tempranas, y al poco conocimiento que tienen las mujeres sobre él para considerar la posibilidad de padecerlo tomando en cuenta diversos factores.
Los médicos especialistas, Dr. Jorge Mendoza Parada y Dr. Jorge Tokunaga Fujigaki, del Centro Oncológico Internacional, detallaron que, anualmente, en México se detectan cuatro mil casos nuevos de cáncer de ovario ocupando este el tercer lugar, por número de casos, en la incidencia de cánceres ginecológicos.
Atendiendo la recomendación internacional del 8 de mayo como Día Mundial de la lucha contra el Cáncer de Ovario, fecha que va a cumplir cinco años de conmemorarse, ya que inició en el año 2013, las asociaciones médicas en la región, públicas y privadas, hacen lo propio para orientar sobre este tipo de cáncer.
La mayoría de los casos se diagnostican en mujeres de entre 40 y 59 años de edad, señaló el cirujano oncólogo Mendoza Parada; sin embargo, advirtió que hay un número significativo de casos en mujeres de 30 años.
Los síntomas del cáncer, que se pueden fácilmente confundir con otras enfermedades, incluyen el aumento de la talla abdominal, hinchazón continúa, dificultad para comer, sentirse llena rápidamente, dolor pélvico o abdominal, necesidad de orinar con mayor urgencia o frecuencia, indicó el oncólogo Tokunaga Fujigaki.
Debido a que no existe una prueba específica para la detección oportuna, la mayoría de los diagnósticos se da en una etapa tardía, lo que reduce la tasa de supervivencia de la paciente, comúnmente en las que ya pasaron la menopausia.
El diagnóstico del cáncer de ovario se realiza ante la sospecha clínica con exámenes de laboratorio que incluyen la determinación de sustancias como el antígeno CA125, además de estudios de imagen, como la tomografía pélvica; no obstante, el diagnóstico definitivo será posterior a un estudio por patología de un fragmento de la lesión tumoral encontrada.
La paciente de cáncer de ovario, necesitará llevar su tratamiento de manera integral, incluyendo asistencia de nutrición oncológica, terapia de rehabilitación, salud emocional, con psicología o psiquiatría según requiera, además de atención en clínica del dolor y en diagnósticos desfavorables se requiere de cuidados paliativos.
Este conjunto, mencionado, de cuidados y servicios complementarios pero necesarios, son los que en su mayoría no reciben las pacientes no solo de cáncer de ovario, sino de otros tipos de cáncer, aseguraron los médicos.
A manera de prevención, el doctor Jorge Mendoza Parada precisó que se debe tener en cuenta que las mujeres con antecedentes familiares de neoplasia ovárica o mamaria, tienen mayor probabilidad de padecer un cáncer de ovario.