Juan Miguel Hernández
Tijuana.- Menos de 2% de los solicitantes de asilo político de origen mexicano y centroamericano, obtienen protección por parte del Gobierno de Estados Unidos, informó el profesor e investigador de la Universidad de California en San Diego, David Fitzgerald.
En el marco de la conmemoración del Día Mundial del Refugiado, el especialista señaló que la administración norteamericana ha restringido el asilo por género y violencia, descartando además la migración por temas de pobreza extrema.
El asilo es un juego político porque desde que Trump se postuló se dio cuenta de que podía llegar a la presidencia, podía ser duro y no le importa el costo humano
Aunado a lo anterior, para los solicitantes de asilo es complicado demostrar los motivos que le obligaron a abandonar sus países de origen.
“Un gran problema es que los solicitantes no tienen un papel de gobierno que muestre su urgencia de salir y cuentan con muy poca pruebas. Es cuestión de convencer que se dice la verdad al juez, pero es un gran problema porque algunas entrevistas se hacen por la vía online”, expuso.
En la conmemoración del Día del Refugiado, se indicó que los últimos tres años las solicitudes de condición de refugiado en México han crecido 600% y en lo que va del año, 593 mil 507 solicitantes de asilo y migrantes han llegado a la frontera sur de Estados Unidos desde México. Esto sin contabilizar los 68 mil mexicanos por Baja California.
“Tijuana y otras ciudades de la frontera hemos vivido en crisis desde comienzos del año pasado; las caravanas centroamericanas, migrantes africanos, familias enteras desplazadas, menores migrantes se han quedado en la frontera ante un futuro incierto”, expresó el director de la Casa Migrante, Pat Murphy.