El gobierno de Baja California recibirá 200 litros por segundos de agua potable a través de la conexión a la tubería de emergencia entre México y Estados Unidos, ubicada en Otay, para distribuir, inicialmente en las colonias de Tijuana aledañas a ese ducto.
Carlos Alberto Machado Parra, titular de la Unidad de Planeación de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (Cespt), mencionó que el uso de la toma binacional será durante julio y agosto, derivado del incremento del consumo durante la temporada de calor.
“Debido a la alta demanda de agua en la temporada de verano, la Cespt mantiene abierta la conexión binacional en Otay, para abastecer a las colonias de los alrededores [...] en el verano se va a requerir un volumen extra en la Presa del Carrizo", dijo el funcionario.
Durante una presentación con integrantes de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), Machado Parra indicó que son alrededor de 200 litros por segundo los que se conducen por esta infraestructura.
Machado Parra dijo que el gobierno de Baja California contempla pagar 85 millones de pesos, para trasladar el agua que proviene del Río Colorado y llega a Tijuana a través de infraestructura hidráulica norteamericana, no mediante el acueducto que viene de Mexicali.
No descartó la utilización de esta alternativa para el abastecimiento del recurso durante el resto del año, en caso de que exista una falla en el sistema de bombeo del acueducto.
En 2023, la Cespt pagó al gobierno de Estados Unidos 1 millón 692 mil 625 dólares (alrededor de 30 millones de pesos), para trasladar agua entre agosto y diciembre de ese año, de acuerdo con información obtenida en la Plataforma Nacional de Transparencia.
El director de la Cespt, Jesús García Castro, declaró en enero pasado que no contemplaban abrir la conexión de emergencia para este año porque las presas contaban con suficiente recurso para la demanda de la ciudadanía.
Machado Parra reconoció que el requerimiento de agua en la zona costa ya está a la par de la capacidad del acueducto del Río Colorado.
“La presa El Carrizo necesita tener un almacenamiento de 16 millones de metros cúbicos para que la misma presión del agua por gravedad llegue hasta la potabilizadora El Florido”, agregó.
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Recalcó el alto costo que representa operar el acueducto del Río Colorado y que actualmente la Cespt paga alrededor de 110 millones de pesos mensuales por el consumo de energía eléctrica.
Además, la paraestatal invierte otros 180 millones de pesos en el pago de energía eléctrica para el resto de las estaciones de bombeo de la red hídrica, añadió.
