Tijuana.-La implementación de la tecnología en ambos lados de la frontera entre México y Estados Unidos ha sido desigual, motivo por el cual el tráfico de drogas y armas no ha disminuido, comentó José María Ramos, investigador del Colegio de la Frontera Norte (Colef).
Explicó que las innovaciones al cruce vehicular han funcionado para reducir el riesgo de un atentado terrorista en las fronteras, pero no para evitar el tráfico de drogas, personas y armas.
Indicó que para evitar el cruce ilegal de armas provenientes de Estados Unidos a México, se deberían de implementar detectores de metal, pero que “Estados Unidos no se ve que tenga toda la voluntad”.
El investigador aseguró que las instalaciones de estos debería de ser una colaboración entre ambos países.
Mencionó que en el caso del cruce de San Ysidro a Tijuana, existen casetas del lado norteamericano, las cuales no están en funcionamiento y podrían ser utilizadas para colocar detectores de metal.
Mientras que en el lado mexicano no se cuenta con ningún tipo de detección, ya que las revisiones son aleatorias y de manera manual, mencionó.
“Es un tema que México tiene que plantear, para México sí es importante el tema de tráfico de armas”, mencionó Ramos.
ACCEDE A NUESTRA EDICIÓN DIGITAL ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!
Esto debido a que estas se destinan principalmente para surtir a grupos delictivos, aunque para Estados Unidos crece la demanda e industria de armas.
“A ellos no les interesa que controlen, que se vayan más”, mencionó Ramos.
La semana pasada el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar y el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, mantuvieron un encuentro en Tijuana, para hablar sobre infraestructura en la frontera.
Ebrad afirmó que la tecnología de ambos países no está conectada ni es compatible, por lo que se tienen que hacer un gran avance en este sector para que haya “más movimiento y más seguridad”.
El embajador Salazar mencionó que la prevención de la violencia se debe de trabajar en conjunto, “esto de las armas que vienen (de Estados Unidos a México) es problema de nosotros también, eso no se decía antes”.