Tijuana.- En el último mes, albergues como la Casa Migrante de Tijuana ha presentado un aumento de más de 30% en la afluencia de personas que solicitan un espacio en sus instalaciones.
Lo anterior según lo informado por el director del albergue, Pat Murphy, quien precisó que en los 30 días recientes pasaron de alojar 80 personas hasta un promedio de 130, casi al límite de su capacidad.
Indicó que el 50% de los casos que siguen atendiendo son aquellos migrantes que vienen para tener su cita por medio de la aplicación de CBP ONE, seguido de aquellos que vienen huyendo de la violencia de Guerrero y Michoacán.
“Vienen muy confundidos, no saben qué hacer, no entienden el proceso y piensan que se pueden entregar, pero la gente que se está entregando están siendo deportados”, agregó sobre este grupo de personas.
Descartó que por el momento haya una llegada masiva de migrantes chiapanecos, aunque sí dijo que hay gente que vino de Guerrero tras el huracán Otis y John.
El activista indicó que las últimas semanas también se ha presentado un alza en las deportaciones, sin embargo, pese al ofrecimiento de apoyos para que retornen a sus lugares de origen, los migrantes no quieren retomar a sus lugares de origen.
“La gran mayoría aceptan el apoyo para regresar a sus lugares de origen, pero muchos de ellos llegan huyendo de la violencia y los quieren mandar para allá y llegan con esta confusión, qué hago con mi vida, hay familias que han vendido todo y regresar a su lugar de origen no ayuda nada”, comentó.
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Dijo que en la Casa Migrante han apoyado a grupos de migrantes deportados para que se adapte a la dinámica fronteriza, obteniendo un empleo.
De acuerdo al Instituto Nacional de Migración, hasta agosto pasado (última actualización), iban contabilizadas 31 mil 089 deportaciones por Baja California.