Migrantes siguen a la espera de cita

“Pueden pasar tres cosas: una es que me den el asilo, que es con la que estoy confiando; número dos, es que me regresen a Tijuana; y número tres, que me deporten para Honduras”

  · sábado 16 de marzo de 2019

Karina Torres

Tijuana.- Han pasado seis meses desde que Douglas, de 35 años, decidió salir de su natal Honduras para probar suerte en el vecino país norteamericano y mejorar la calidad de vida de él y su familia; no obstante, pese al largo recorrido que realizó junto a una de las caravanas migrantes que llegó a Tijuana en octubre de 2018, será hasta este próximo martes 19 de marzo cuando sabrá si las autoridades de inmigración de los Estados Unidos le darán la oportunidad de permanecer en suelo estadounidense.

“Lastimosamente, ellos (Gobierno Norteamericano) tienen sus reglas y todo, y pues solamente fui a una entrevista con un oficial de inmigración; y de esa forma, solamente me entrevistó, duró de 30 a 45 minutos la entrevista, y luego de eso me entregaron mi hoja para ser retornado a Tijuana (…) regresé el 30 de enero junto a un grupo de 12 migrantes que cruzaron por la garita de El Chaparral”, platicó Douglas.

El hondureño formó parte del primer grupo de migrantes que fueron retornados a Tijuana por la garita El Chaparral, como parte del Protocolo de Protección al Migrante (PPM), programa implementado de forma unilateral por el Gobierno de los Estados Unidos.

Aunque su retorno se registró al tercer día de que se implementara el programa, Douglas fue parte del primer grupo que cruzó hacia Tijuana; los dos primeros retornos se dieron de forma individual por la misma garita El Chaparral.

Douglas llegó a Tijuana durante el pasado 27 de noviembre de 2018 como parte de la segunda caravana migrante que emprendió el viaje desde Honduras hacia esta ciudad fronteriza. Originario de Honduras, en donde dejó a su esposa y dos hijos de 10 y siete años, aseguró que ha sido un camino difícil, de mucha espera, pero confía en que el Gobierno de los Estados Unidos le dé una oportunidad de permanecer y mejorar su situación económica.

“Me siento muy positivo. Sé por qué salí de mi país, sé por qué estoy aquí y sé que me van a dar el asilo; confío plenamente”, afirmó.

“Yo jamás hubiera puesto en riesgo mi vida si mi país hubiera estado bien. Tuve que migrar porque las cosas no están bien, las cosas allá con el gobierno, con las pandillas, con la falta de empleo, falta de oportunidades, están tremendas; lastimosamente, una crisis en mi país que no puedo hacer nada para poder cambiarlo porque no soy nada para ellos; entonces, tuvimos que emigrar, y es triste ver que la situación no cambia, ¿por qué razón? porque siguen emigrando”, puntualizó Douglas.