Tijuana.- En el pizarrón está escrita la fecha del último día de clases: martes 17 de marzo de 2020. Casi dos años después, la profesora Eva Pérez vuelve a tener cerca de ella a sus alumnos.
Para ella es especial porque será su último grupo, antes de jubilarse después de más de 30 años de servicio. Para sus estudiantes de primero A de la escuela primaria “Braulio Maldonado”, también es especial, pues conocen la escuela y a sus compañeros, luego de más de seis meses de clases virtuales.
Al entrar al aula, los pequeños lucen nerviosos, apenas hablan y preguntan el nombre a su nuevo mejor amigo. Tomará varios minutos para que pregunten a la maestra qué hará en el primer día de clases.
“Los veo pasivos, nerviosos, ya con el paso de los días van a tener esa tranquilidad y vamos a trabajar y mucho”, comentó Eva Pérez.
Para `romper el hielo´, la maestra les pide que aplaudan y les promete que van a contar cuentos y a correr poco más tarde.
“El trabajo es vital para los niños como para nosotros”, agregó la docente.
MI PRIMER DÍA DE CLASES
María José luce alegre por vestir de nuevo su uniforme. Junto a su mamá confiesa estar contenta y feliz, aunque le molesta usar el cubrebocas, pero confía que pronto ya no tendrá que llevarlo.
Su madre, quien la sostiene del brazo, relata que era necesario la vuelta a las aulas, pues aunque su hija ya va en tercero de primaria, apenas convivió unos meses con sus compañeros.
“No es lo mismo que los niños estén sin clases presenciales, explican mejor, porque los padres poco comprendemos las tareas. La maestra les daba la tarea y explica a los alumnos y ahí resolvía”, explicó la jefa de familia, quien no compartió su nombre.
En el plantel ubicado en la colonia Buenos Aires Norte, se instalaron filtros sanitarios para el ingreso a los planteles. Además de que ciertos grupos estaban a la mitad de su capacidad.
Por supuesto que no faltó aquellos padres que después de dos años, llevaron tarde a sus hijos.
NO TODAS LAS ESCUELAS REGRESARON
Este lunes en la primaria Cuauhtémoc, en el Infonavit Río, antes que clases, los padres de familia agarraron escoba, brocha y pintura, para darle retoques a los salones, previo al regreso de sus hijos, hasta hoy martes.
“Venir a limpiar la escuela para que nuestros hijos regresen y esté limpio el salón. Ya hacía falta”, dijo una de las madres que participó.