Tijuana.- La historia de Tijuana no comenzó hace 134 años, como conmemoramos este 11 de julio, sino que se remonta a más de 10 mil años, y la muestra de ello es el fósil de un molusco marino localizado en la canalización del Río Tijuana.
La piedra que lo conservó durante tanto tiempo llegó hasta personas en situación de calle en el también conocido “bordo”, pero hoy está en el Museo de Historia de Tijuana (Muhti).
“Estaban preparando sus alimentos, de alguna manera se abrió la piedra, estas personas al ver su valor económico se lo vendieron a otra persona y esta lo trajo al museo”, relató Ricardo Silvestre Pérez, asistente del Muhti.
El fósil forma parte de la exposición permanente inaugurada en 2010 en el antiguo Palacio Municipal de la Zona Centro que anualmente tiene entre 30 mil y 45 mil visitantes.
Silvestre Pérez explicó que el Muhti fue creado con dos propósitos: preservar el patrimonio de la ciudad y abordar la historia con identidad tijuanense.
Alrededor de la mitad de su colección está conformada por donaciones de coleccionistas privados y el restante son adquisiciones del Muhti.
“Varios coleccionistas se acercaron para una parte donarla y otra prestarla al museo”, mencionó Silvestre Pérez.
La exposición permanente del museo está conformada por cinco salas, la primera con la Historia Natural de Tijuana.
La sala está cubierta por fotografías del mastodonte localizado en los 60 en el área periférica de playas durante una de las construcciones para desarrollar el área.
Como Tijuana no tenía condiciones para conservar los restos, el fósil estuvo en la Facultad de Ciencias Marinas de la Universidad Autónoma de Baja California en Ensenada, pero ya está en el Muhti, donde los preparativos para exhibirlo no han concluido.
LOS ORÍGENES
Quienes visitan el Muhti pueden conocer sobre los primeros pobladores de Tijuana, así como la historia social y política de esta frontera.
El guía mencionó que muchos de los menores que visitan el Museo en los recorridos escolares desconocen el origen de los primeros pobladores.
“Los yumanos nos dijeron que se les aplicaba racismo y discriminación, entonces a los niños les comentamos que hay que respetarlos porque son los primeros pobladores de Baja California”, mencionó.
También hay un espacio dedicado a la Revolución de 1911 y la defensa armada de la ciudad.
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AGUACALIENTE ANTES QUE TIJUANA
En una de las salas, una pared cubierta por un antiguo mapa de la península de Baja California comprueba la popularidad del complejo turístico de Aguacaliente.
“Los visitantes extranjeros, sobre todo estadounidenses, en lugar de decir Tijuana, decían: vamos a Aguacaliente. Por eso en el mapa no aparecía Tijuana”, contó Silvestre Pérez.
La historia del casino es la que más llama la atención de los visitantes porque hay una maqueta del antiguo complejo turístico y diversos artículos en exhibición.
También se aprecia una maqueta a escala de la famosa Fuente del Fauno, que era la entrada al balneario y actualmente forma parte de las instalaciones de la Preparatoria Federal Lázaro Cárdenas.
Entre la colección hay diversos objetos de negocios emblemáticos de la región como las primeras botellas de la Lechería Jersey y las extintas pinturas Calette.
No puede faltar un espacio para recordar la famosa “barra más larga del mundo”, conocida como “La Ballena”, y un ejemplar de Tijuana Inn, la primera novela escrita por un tijuanense y ambientada en esta ciudad, firmada por Hernán de la Roca.
“Abordaba la famosa leyenda negra de Tijuana, todo todo lo malo que se hablaba en la prensa estadounidense sobre Tijuana, que era violencia, mafia, prostitución y demás. Él lo aborda mencionando la realidad de cómo era Tijuana en esa época”, explicó Silvestre Pérez.
LA MÚSICA
La música también tiene un espacio para conocer, por ejemplo, al guitarrista Javier Batiz y varios LP de los Moonlights, una banda icónica de esta frontera.
El último y más reciente espacio es el Salón de la Fama de los grandes músicos de Tijuana, inaugurado en 2022.
“El homenaje consistía en plasmar sus manos, fieles réplicas de estos músicos, con sus instrumentos favoritos”, dijo Silvestre Pérez.
Se pueden observar percusionistas, trompetistas, tecladistas, cantantes, bateristas, guitarristas y compositores.
El Muhti también cuenta con salas con exhibiciones temporales, pero su espacio se ha vuelto insuficiente para todo su inventario, hoy archivado en espera de ser puesto en exhibición, contó Ricardo Silvestre.
Entre los planes del instituto está la ampliación para abordar de manera más detallada los distintos procesos históricos de la ciudad, en muchas ocasiones desconocidos por sus habitantes.
