El cierre de la Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe desde finales de marzo ocasionó que comerciantes de la zona, como Teresa Martínez se vean afectados en sus ventas al disminuirse el número de católicos que visitaban el recinto eclesiástico.
Al caminar por los alrededores se puede visibilizar a un importante número de personas caminando, pero pocas son las que se detienen en los puestos donde se ofertan escapularios, crucifijos, oraciones en estampita, plática Teresa.
"Se ha bajado mucho la venta y más para mí que nomás vengo los fines de semana. Antes sí se vendía que unos 300 por día, ahorita no vendo ni los 100, a veces menos".
"Mientras no abran la iglesia van estar bajas las ventas porque la gente viene a dar gracias los domingos que hay misa, y ahí es cuando se vende, pero ahorita ni cómo, hasta que no vuelvan abrir la iglesia", subraya.
En la página oficial de internet de la Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe no hay una fecha específica sobre cuándo se puedan abrir de nuevo las puertas del recinto, en ese sentido se presume que una vez comience a descender el semáforo de contagios de Covid-19 se podrá pensar en una reapertura.
"Si se bajó demasiado, están escasas las ventas ahorita. Yo llegué a las siete y media, ya son las 11 y no he vendido nada, a estas horas ya de perdida llevara 50 pesos, pero nomás he gastado en el almuerzo, en el café que está más caro", narró.
Por lo pronto las misas se siguen oficiando por vía internet de lunes a sábado a las 8:00 y 19:00 horas, mientras que los domingos a las 10:00 y 19:00 horas, acercando con ello a los creyentes, pero dejando sin clientela a los puestos afuera de la catedral.