Tijuana.- La complicada relación entre el gobernador del estado, Jaime Bonilla Valdez, y el alcalde de Tijuana, Arturo González Cruz, es sinónimo de falta de profesionalismo para manejar a Baja California y Tijuana respectivamente, consideró el presidente del PRI en Baja California, Carlos Jiménez Ruíz.
Me tiene sorprendido este tipo de pleitos conyugales les llamaría yo, creo que en las familias se arreglan las cosas pronto y acá lo que no ha existido es madurez, no ha existido responsabilidad, no existe seriedad, no existe profesionalismo en el ejercicio de la función pública
“Esto es muy lamentable porque tienen como rehén a la ciudadanía bajacaliforniana, en este caso a municipios como Tecate y Tijuana, teniendo esos desencuentros entre los alcaldes y el propio gobernador, eso habla muy mal de ellos, habla muy mal de Morena y de los gobiernos que emergen de este partido, porque parece que lo toman a juego cuando hay problemas muy serios en materia de inseguridad”, afirmó.
Han sido diferentes las ocasiones en que Jaime Bonilla Valdez desaprueba públicamente la gestión de González Cruz, mientras que éste también le ha contestado al gobernador, entablándose en conflictos que poco o nada abonan a la ciudadanía, recalcó Jiménez.
“No vemos más que pleitos y diferencias entre ellos, son de tantas ideologías, de tantas corrientes políticas los que se integraron a Morena que ahora son gobierno, que ni ellos mismos se entienden, e insisto, el rehén es el ciudadano, no veo obra pública, no veo fomento al deporte, no hay fomento a la cultura, se recortaron los programas para jóvenes emprendedores”.
“No existen los programas para apoyo al campo, para las mujeres, por supuesto que es en prejuicio del ciudadano y eso es muy lamentable porque la ciudadanía les dio el voto de confianza”, concluyó.