A casi dos semanas de la firma de la orden ejecutiva que permite a Estados Unidos deportar de manera inmediata a las personas que ingresen de manera irregular a ese país, el número de cruces se ha mantenido.
La medida del presidente Joe Biden entró en vigor la medianoche del miércoles 5 de junio y permanecerá hasta que el número de cruces irregulares disminuya a mil 500 encuentros diarios a lo largo de la frontera.
Pero según cifras publicadas en su cuenta de X, Patricia D. McGurk-Daniel, jefa de la Patrulla Fronteriza en el sector San Diego, informó que entre el 5 al 11 de junio fueron aprehendidas siete mil 693 personas de 71 países diferentes que ingresaron irregularmente a Estados Unidos.
En el mismo periodo, 162 menores de edad fueron localizados intentando ingresar sin acompañantes.
Luis Miranda, subsecretario adjunto principal de comunicaciones del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, explicó que los menores que ingresan sin acompañantes podrán ser sometidos al proceso de asilo y no serán retornados inmediatamente como el resto de las personas en tránsito.
Durante esa primera semana de junio reportada por McGurk-Daniel, agentes del CBP rescataron a 51 personas y localizaron a 52 víctimas de trata.
Una semana antes de la firma de la orden ejecutiva, entre el 29 de mayo y el 4 de junio, fueron aprehendidas ocho mil 488 personas de 61 países en su intento de cruzar ilegalmente la frontera.
En el mismo periodo fueron detenidos 160 menores no acompañados en su intento de cruzar por San Diego, además hubo 35 rescates y 34 encuentros con personas víctimas de trata.
Luis Miranda declaró en conferencia de prensa virtual, un día después de que la orden ejecutiva entrara en vigor, que iniciaron de manera inmediata el retorno de personas bajo ese nuevo mandato.
Representantes de la sociedad civil instalados en Tijuana mencionaron que los nuevos procesos de retorno los ha estado realizando el Instituto Nacional de Migración (INM).
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Indicaron que no han podido monitorear el regreso de connacionales ni de personas extranjeras, porque esos migrantes no han llegado a los albergues de la ciudad.
La Coalición Pro Defensa del Migrante, consideró que el proceso migratorio realizado por el INM bajo las nuevas reglas es “muy poco transparente”.
Autoridades migratorias en la ciudad con conocimiento de estos procesos sólo indicaron que las deportaciones bajo la nueva orden ejecutiva han sido “limitadas”.