Aunque se trata de un padecimiento que cuenta con tratamiento, aún existe ignorancia sobre el VIH/Sida y sus implicaciones.
Jennifer Salas es hermana mayor de una chica de 17 años que tiene VIH/Sida. Ambas llegaron a “Eunime por Tijuana”, una casa hogar para niños, niñas y adolescentes afectados por esta condición. La menor llegó a los cinco años al orfanato estando en fase terminal, por medio de una conocida de su mamá que le informó del lugar.
Cabe señalar que el VIH es un virus que daña el sistema inmunológico, destruyendo los glóbulos blancos que te defienden de una enfermedad y el Sida es la enfermedad causada por el virus, son la personas que están infectadas, pero ya en etapa terminal.
La directora y fundadora de Eunime, Juana Ortiz, fue personalmente a recogerlas a su hogar porque los padres no les daban los cuidados necesarios y tampoco tenían los recursos económicos para atenderlas.
“La mayoría de los que están con nosotros son abandonados o están por omisión de cuidados. Por lo regular son usuarios de drogas o personas de escasos recursos”, mencionó la directora de Eunime.
En la casa hogar se les ayuda a sobrellevar sus enfermedades con medicamentos de por vida y también reciben mucho apoyo emocional, lo cual es importante para que ellos puedan continuar con su vida lo más normal que se pueda.
Lamentablemente, aún hay muchos estigmas hacia las personas que sufren de VIH. En la casa hogar hay muchos pequeños y no es raro que ellos sufran discriminación hasta en las escuelas donde asisten a clase.
“Les tocó que les apedrearan, que los mismos maestros y padres de familia hicieran reuniones para sacarlos”, comentó Jennifer Salas.
Ahora, su hermana menor va a la preparatoria, toma medicamentos, tiene amigos con los que se lleva muy bien y tiene varias metas que quiere cumplir en la vida, teniendo la mentalidad de que la única diferencia entre ella y los niños sanos es que ella toma medicamentos.
Aunque 94% de los contagios de VIH/Sida se dan por sexo sin protección, hay otras formas por las que se puede contagiar esta enfermedad: ya sea por contacto sanguíneo directo o transmitido de la madre al bebé.
Así como la hermana de Jennifer, hay otras personas que viven con esta enfermedad. Por ejemplo, el joven Isaac Ulises tiene un amigo con VIH que fue contagiado y sabe que se siente muy preocupado porque su vida cambió repentinamente, ahora tiene que cuidarse y medicarse.
“Las personas siguen considerando que es de alto riesgo contraer ese virus. Nosotros que lo vivimos de cerca con alguien cercano no le damos importancia, sabemos lo que nos comentan y lo que vemos en internet muy esporádicamente. No nos damos a la tarea de investigar a fondo”, comentó Isaac Ulises.
Mientras tanto, la directora de Eunime y la institución se esfuerzan por concientizar al mayor número de personas que puedan, para generar una sociedad más inclusiva para todos.