Crisstian Villicaña
Tijuana.- Las más de mil 500 muertes violentas ocurridas en la ciudad durante este 2019 han contribuido a que Tijuana sea uno de los municipios más sangrientos del país. La mayoría de estos decesos están relacionados con el crimen organizado, razón por la cual el arzobispo de la ciudad, Francisco Moreno Barrón, pide a la delincuencia tome conciencia y deje atrás sus acciones fuera de la ley.
"Yo hago un llamado a todos los que promueven la violencia para que reconozcan que Dios les ama, que ustedes son muy valiosos porque salieron de sus manos, que depongan las armas, que depongan la violencia y que den también su aporte con sencillez y corazón para construir una mejor sociedad, donde ustedes y sus familias sean también muy felices", señaló.
La vida de alguna manera parece haberse abaratado en la ciudad desde hace unos años, tan sólo en lo que va de la actual administración se contabilizan más de cinco mil 800 muertes por arma de fuego, objetos punzocortantes.
"Todos estos asesinatos nos hacen ver la desvalorización de la persona, que la vemos como una moneda de cambio, como un objeto y que la vida misma la estamos tomando como dueños de ella, cuando solamente somos administradores de lo que Dios nos ha confiado por un tiempo", acentuó.
Sobre el hecho que sean muchos jóvenes los que estén perdiendo la vida en estos hechos, agregó."Es una pena que mueran cuando apenas están comenzando a vivir, esto es un reto para la familia, para las instituciones, para la sociedad, formar en los valores a los niños, a los adolescentes y jóvenes de manera que valoren su propia vida y la vida de los demás".