Por considerar que el apoyo de albergue que les ofrece el gobierno municipal es con la intención de retirarlos definitivamente de las inmediaciones de la línea internacional con Estados Unidos, migrantes que ocupan el campamento de El Chaparral optan por mantenerse en el sitio, pese a las inclemencias del tiempo.
En un recorrido realizado por El Sol de Tijuana, un hombre originario de Michoacán, quien pidió el anonimato, expresó su desconfianza hacia la intención de las autoridades de llevarlos al refugio de la Unidad Deportiva Reforma.
Indicó que, durante la segunda tormenta invernal registrada en Tijuana, la cual inició el pasado 23 de diciembre, manteniéndose durante Nochebuena y Navidad, varias personas fueron trasladadas, sin que hasta el momento hayan retornado al campamento.
En la víspera de Nochebuena autoridades municipales dispusieron de unidades del transporte público de la ciudad para movilizar a los migrantes que voluntariamente accedieron a ser llevados a un refugio, en donde pudieran protegerse del mal tiempo.
A pesar de los esfuerzos por convencer a los integrantes del campamento de El Chaparral de ser trasladados a un lugar más adecuado, solo 10 migrantes, la mitad de ellos niños, accedieron a ser llevados al albergue Reforma, el cual se habilitó para recibir a 300 personas, reportó Bernardo Villegas, director de Protección Civil de Tijuana.
El funcionario precisó que un total de seis refugios temporales fueron dispuestos en distintas unidades deportivas de la ciudad, no solo para asistir a migrantes, sino también a personas que habitan en zonas de riesgo.
Agregó que El Chaparral se considera como una zona de riesgo, por el encharcamiento y condiciones en que se encuentra el campamento migrante, sin embargo, reiteró que el traslado de sus habitantes a un albergue seguro, debe ser voluntario.
El traslado se efectuó bajo el acompañamiento de personal de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Baja California, presentes en calidad de observadores, reportó esta institución.
Autoridades estiman que un promedio de 400 migrantes se encuentra en el campamento ubicado en las inmediaciones de la garita El Chaparral, por el momento cerrada al cruce internacional, se mantienen a la espera de respuesta de asilo por parte del gobierno norteamericano.
Las lluvias y el frío es sólo un pretexto para sacarnos de aquí, irnos sería perder la oportunidad de asilo que estamos esperando, dice un migrante michoacano