Tijuana.- Más de tres años lleva detenida la denuncia penal que interpusieron los vecinos afectados de Lomas del Rubí contra quien resulte responsable del derrumbe registrado en febrero de 2018, esto porque no cuentan con el millón y medio de pesos que cuesta el estudio geotécnico que se pide para avanzar el proceso.
De acuerdo a lo expuesto Atalía Ramos Solís, representante de los colonos, a pesar de que la Comisión de los Derechos Humanos (CEDHBC) emitió la recomendación 10/2019 al gobierno del estado para que diera acompañamiento a las víctimas, la administración estatal ha ignorado a los vecinos, pese a que el acompañamiento también ha sido una solicitud del gobierno federal.
“Se ha estado gestionando individualmente ante diferentes instancias de gobierno. Hemos estado diciéndole al gobierno del estado, que tiene la obligación dar el recurso para tener el estudio, porque no tenemos acceso a la prueba pericial, pero el gobierno dice que no es su obligación, pero ellos tienen la obligación de hacerlo para que no se quede la denuncia así”, externó.
Comentó que si bien el gobierno municipal ya realizó un estudio en el área afectada, se requieren de tres, para corroborar la afectación en un área más extensa.
Mencionó que sumado al problema de la falta de recursos para el estudio geotécnico, solo a 130 familias se les asignó una vivienda en Lomas de la Esperanza, pero quedaron entre 20 y 30 familias, las cuales vivían en terrenos aledaños a los de sus familiares, que no han recibido apoyo.
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Ramos Solís aseguró que aún viven 110 familias muy cerca del derrumbe, que aún corren el riesgo de perder su patrimonio, por lo que es necesario tener el estudio geotécnico, para determinar qué tanto es el peligro que tienen al permanecer en la zona.
“Que haya una afectación mayor y estas viviendas se pueden caer sin avisar, el estudio es necesario para que las familias tengan la certeza de cómo viven alrededor”, expresó.
Dijo que hace tres semanas se reunieron con el secretario general de gobierno, Catalino Zavala Márquez, quien se comprometió a ver los recursos necesarios para ayudar a los vecinos que aún no han recibido apoyo tras el derrumbe de su vivienda.
“Ya estamos cansados”, finalizó.
