Tijuana.- "Magda" trabajó como enfermera en una reclutadora de personal hasta septiembre del año pasado. A pesar de ello, asegura que la empresa continúa utilizando su cédula profesional en los procesos de contratación que realiza.
El hecho, del cual dice tener pruebas, le preocupa en demasía luego que se sigue haciendo uso de sus datos cuando lleva meses separada de la empresa.
"La enfermera que está trabajando no tiene cédula, entonces la jefa inmediata les dijo que pusieran mi número de cédula para autorizar los expedientes que se envían a la fábrica, porque sin la cédula no le iban autorizar ingresar personal de esa reclutadora".
La pandemia por el Covid-19 ocasionó que se dé una revisión más estricta sobre el personal a contratar, en ese sentido "Magda" teme por posibles consecuencias a su persona. "Si pasa algo se van ir contra mí porque están metiendo personal que no es apto para la fábrica", agregó.
La reclutadora, añade la presunta afectada, ha negado la utilización de la cédula; el nombre de la misma no lo quiso revelar en vías de no entorpecer un posible caso legal, el cual estaría iniciando próximamente, indicó.
Sobre ese renglón jurídico, se le cuestionó al abogado Emmanuel Farías, cuáles serían los delitos que se podrían presentar en una situación como la que vive la enfermera, a lo que respondió.
"Sería usurpación de profesiones, pero el probable responsable sería la persona que ahora está en su lugar, aunque podría haber una corresponsabilidad por parte de la empresa como persona moral", precisó.
Por el momento "Magda" está en espera de tomar decisiones junto a un representante legal que le asesore en el proceso.