Tijuana.- El avance de la contaminación en playas del Sur de California preocupa a activistas, ante la inacción por parte de las autoridades mexicanas para frenar el derrame de aguas negras, planteó la directora de Comunicación y Políticas Públicas de Costa Salvaje, Fay Crevoshay.
La activista condenó que la contaminación se ha extendido más kilómetros al norte de la frontera, representando un problema para los residentes del vecino país.
“Es peor cada vez y ahora no nada más está cerrado Imperial Beach, está cerrado Coronado también. Estos pequeños escurrimientos, pero muchos pequeños escurrimientos se vuelve mucha agua y afecta. El problema es peor, cada vez está yendo más lejos”, agregó.
Mencionó que la medición que han elaborado distintas organizaciones han arrojado alto nivel de bacterias en las playas de Coronado.
“Imagínate que tú pagaste 250 dólares cada noche para estar frente al mar en Hotel Coronado y la playa se ve de lejos porque no puedes ingresar”, comentó.
La directora de Comunicación y Políticas Públicas de Costa Salvaje lamentó que los gobiernos locales de lado mexicano no hayan acelerado la implementación de soluciones para detener el derrame de aguas negras.
“No es un problema creado ahorita, no es culpa de la administración, pero cuando te vuelves la administración, se te cae encima eso y hay que hacer algo, más que juntas, hay que buscar dinero y meterlo ahí, pero nadie quiere meter dinero al drenaje , porque no se nota”, manifestó.
Por último, recordó que ya se había impulsado un plan para atender la contaminación que había en Punta Bandera, sin embargo, este se frenó.
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“Ya había solución en Punta Bandera, la pararon, ya estaban trabajando, ya había una compañía Israelí que iba a hacer los trabajos y le pusieron permisos, luego el otro y de ahí se detuvo. Esto se pudo se haber solucionado hace como seis años y no se solucionó por barreras gubernamentales”, concluyó.
Cabe recordar que el Gobierno de Imperial Beach planteó al Departamento de Estado de Estados Unidos, la declaratoria de emergencia en esa ciudad, ante la crisis de aguas residuales que llegan de Tijuana, que ha provocado los altos niveles de contaminación en las playas del vecino país.