Tijuana.- El anuncio del cierre parcial de la frontera entre México y Estados Unidos, traerá impactos económicos y sociales nunca antes vistos en región, estimó el director Smart Border Coalition, Gustavo de la Fuente.
El dirigente del organismo binacional anticipó grandes afectaciones a ambos lados de la frontera, los cuales se ven beneficiados por el cruce diario de más de 150 mil personas, las cuales trabajan, van al médico, realizan compras, entre otras tantas actividades.
“Es una afectación tremenda como nunca la vamos a ver y nunca hemos visto. Nuestras autoridades gubernamentales deben estar en comunicación y deben de producir líneas de acción, porque nuestra región está relativamente aislada del resto de México, tenemos más en común con el lado americano, que con el lado mexicano”, apuntó.
De la Fuente, señaló que hay incertidumbre en la región pues se desconoce el alcance de la medida adoptada por Trump, que traería como consecuencia que gente de ambos lados de la frontera se quede sin ir a trabajar o a realizar actividades esenciales.
“Hay que definir qué significa cruces esenciales, tenemos decenas de miles de personas que trabajan todos los días, tenemos una situación diferente a la frontera con Canadá en muchos sentidos, nosotros realmente tenemos gente que va y viene, porque da un servicio muy importante de un lado y del otro”, comentó.
Precisó que anualmente el intercambio comercial entre Tijuana y San Diego, ronda los seis mil millones de dólares anuales, y áreas como las de San Ysidro, dependen en 94% de los clientes que llegan del lado mexicano.
“Todo el condado de San Diego se vería afectado porque deja de venir de la noche a la mañana la gente que trabaja en San Diego y vive en Tijuana. Dejará de venir gente que empaca los alimentos y vive de la industria alimenticia o están las personas que viajan a Tijuana para temas médicos o gastronómicos”, puntualizó.
ALBERGUES INCAPACES DE RECIBIR MIGRANTES
Otra de las implicaciones de la decisión adoptada por Donald Trump, repercute directamente a los albergues, que no tendrían espacio para recibir a los migrantes que sean expulsados de los centros de detención.
El coordinador de Alianza Migrante, José María García Lara, indicó que los refugios actualmente están a 75% de su capacidad, pero hay poco margen para incrementar este porcentaje.
“Sería muy complicado para nosotros como albergues, son demasiados los que están allá y no tenemos esa contabilidad. Si nos regresan a la cantidad que tienen en esos centros, sería un gran problema”, manifestó.
García Lara, agregó que los últimos días también se ha frenado el otorgamiento de citas para aspirar a asilo político en Estados Unidos.