Tijuana.- Los derechos de la población en contexto de movilidad y refugio no se pueden condicionar, planteó la subsecretaria de Derechos Humanos de Baja California, Melba Adriana Olvera Rodríguez.
La funcionaria estatal aseguró que se busca visibilizar la universalidad de los derechos humanos, como lo es la inclusión educativa para los menores migrantes que arriban a la entidad.
“La movilidad como un fenómeno inherente a la condición humana y a reflejar cada uno de los derechos y las tareas de las instituciones del estado mexicano y las obligaciones para garantizar derechos, eliminar los estereotipos y prejuicios y discriminación, que limitan o resultan en barreras para la inclusión educativa de la niñez migrante”, expresó.
Olvera Rodríguez reconoció que existe un reto en atender a la población migrante que requiere de la atención necesaria para su bienestar.
“Corresponde recibirlos y promover garantía y proteger sus derechos a la educación y reunificación familiar y derecho a la salud psicosocial, donde trabajan autoridades y las organizaciones de la sociedad civil que tienen tantos años trabajando en eso”, manifestó.
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Por último, señaló que se construyó el Plan Estatal de Desarrollo, en el que se trabaja con un enfoque de derechos humanos, con el fin de hacer realidad el derecho a la educación.
“La gobernadora Marina del Pilar ha dicho en diversas ocasiones y hay respuesta de su gabinete, que este es un gobierno derecho humanista, el que ella encabeza. Hay retos como el rezago educativo que presenta la niñez migrante y desplazada por violencia, en este estado no se puede negar la inclusión educativa a ningún niño o niña, basado en hecho de discriminación por su origen o no contar con algún documento”, concluyó.