Debido a que han sido recurrentes los casos de hurto de medicamento, y esta conducta no se encuentra contemplada en el Código Penal del Estado, la diputada local por el PAN, Amintha Briceño Cinco propuso que se castigue esta falta como si fuera robo con violencia, es decir, de 2 a 7 años de prisión.
En la pasada sesión plenaria, legisladora por el PAN presentó una iniciativa de reforma que adiciona un inciso “O” a la Fracción I del Artículo 208 del Código Penal del Estado, referente a:
Robo Calificado.- Se aplicará al delincuente la misma pena del robo con violencia, adicionando a su vez las penas previstas en este artículo, en los casos siguientes: I.- Se impondrá prisión de dos a siete años.
Lo anterior, con el objeto que tanto las vacunas, medicamentos e insumos médicos, lleguen a su destino y se apliquen para el fin que fueron adquiridos.
“Como es bien sabido, desde hace algunos años nos hemos estado percatando a través de los medios de comunicación, que es una situación constante que ha estado sucediendo, la cual no está tipificada.
“Por lo que nosotros estamos buscando que se contemple en el Código Penal, sobre todo que haya sanciones y multas para ello”.
La legisladora local por el PAN comentó que en el Senado de la República se reformó la Ley General de Salud en el año 2020, donde se contempla que el robo de vacunas, en particular por el tema del Covid-19 que estaba presente en ese momento, se regularan las sanciones.
Briceño Cinco recordó que en la pasada administración estatal se sucedieron algunos robos de medicamentos en el sector salud, además, saben de la peligrosidad que representa el fentanilo, así como de los robos en las farmacias particulares.
Se trata de adicionar un inciso al Código Penal a fin que ya esté contemplado el robo de vacunas y medicamentos, aseveró.
En su exposición de motivos, la legisladora argumentó que es una constante el robo de medicamento según lo refiere la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), al informar a la población y profesionales de la salud, sobre el robo de lotes de dispositivos médicos denominado Quabic.
En Baja California, se ha documentado que se ha extraído fentanilo y morfina a través de la prescripción médica a mujeres embarazadas de clínicas de Baja California, las autoridades locales dieron parte a la Fiscalía General de la República (FGR) para que ubique a los responsables de esta red ilegal de distribución de estupefacientes.
Una investigación realizada por un medio de comunicación, revela que el modus operandi de esta estructura delictiva consistía en emitir recetas a nombre de pacientes con nombres falsos o quienes no vivían en los domicilios referidos, los cuales se encontraban en barrancas o sitios de difícil acceso.
Desde el año 2018 el sector salud de Baja California ha sufrido "robo hormiga" de lotes de medicamentos controlados en Tijuana, Ensenada y Mexicali.
