Laura Bueno Medina
El servir, ayudar y atender las heridas de las personas es el compromiso y misión que asumen las personas cuando se unen a la Cruz Roja como socorristas o técnico en urgencias médicas.
María Teresa Pérez ha sido por 20 años socorrista de la Cruz Roja, el ayudar al prójimo “es un privilegio que se asume para toda la vida”, menciona. Ella eligió esta profesión de servicio en conjunto con su esposo y por años han ayudado a personas en riesgo.
Recuerda que empezó como auxiliar de enfermería desde los 13 años de edad, después se retiró para atender a su familia, y con los años regresó a prestar servicio como socorrista, ahora en el grupo de veteranos.
Recomendó a los nuevos estudiantes de socorrismo a no olvidar que esta profesión es de servicio a quienes no pueden valerse por sí mismos, se encuentran enfermos o heridos.
La Cruz Roja Mexicana, delegación Tijuana, celebró a los socorristas en su día, reconociendo especialmente a quienes tienen de 15 a 30 años de servicio hacía la comunidad.
El jefe de socorros, Juan Carlos Méndez, mencionó que con el crecimiento de la población la demanda de los servicios de socorrismo también se ha incrementado de manera exponencial, por lo que se hace cada vez más necesaria la presencia de los técnicos en urgencias médicas.
Asimismo, recordó que ante la violencia que se vive en la ciudad, la Cruz Roja y su personal trabaja bajo un protocolo de seguridad para no poner en riesgo innecesario a los socorristas, ya que hay situaciones en las que los paramédicos deben esperar a que la policía tenga control de la situación para poder ingresar y brindar el servicio.