Daniel Ángel Rubio
El Instituto Nacional de Migración (INM), podría quedar fuera de la estrategia de atención a migrantes a causa de las irregularidades detectadas en esa dependencia, de acuerdo con el delegado del gobierno federal en Baja California, Alejandro Ruíz Uribe.
“Es un escándalo. Allí se tiene que hacer una operación de desmonte importante, y un poco la crisis que tenemos es producto de ese desastre que hay”, apuntó.
Esto mientras daba algunos detalles sobre las revisiones a las oficinas federales para detectar posibles casos de corrupción como parte de las políticas del nuevo gobierno.
Ruíz Uribe subrayó que no es el responsable del tema migratorio, y la confirmación o no de la participación del INM se dará posteriormente.
“Hasta donde sé, no son ellos los que se van a encargar de la atención”, dijo el representante del gobierno federal en este estado, donde se espera un arribo importante de centroamericanos retornados por Estados Unidos.
Sobre las investigaciones en oficinas federales dijo que hay averiguaciones previas por apoyos de desarrollo social que asociaciones que “se clavaron el dinero, no lo reportaron”.
También encontraron desvíos de dinero y plazas donde las personas no trabajaban pero sí recibían un sueldo, que son los llamados “aviadores”.
“Y vienen más. También hemos desmontado intentos de corrupción en otras instancias (…) también acciones de burocratización que parecen, tienen todos los visos de complicar las cosas para ver si ofrecen algo”, agregó.
El delegado federal respondió que estos últimos casos fueron detectados en oficinas como la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
“Hasta donde sé, no son ellos los que se van a encargar de la atención” Alejandro Ruíz Delegado del gobierno federal