Por Nicté Madrigal/Gato x Liebre
El compromiso que hizo el candidato a gobernador por la coalición Juntos Haremos Historia en Baja California, Jaime Bonilla Valdez, de convertir la región de San Quintín en un nuevo municipio, es viable, pero con pocas posibilidades de lograrse calificó maestro Adrián Flores Ledesma, catedrático de la Universidad Iberoamericana Tijuana.
El periodo de dos años previsto para esta gubernatura da pocas pocas posibilidades de lograrse.
El compromiso del candidato se dio durante su gira en esta delegación que enfrenta grandes rezagos sociales y de infraestructura.
San Quintín se encuentra a 185 kilómetros de la cabecera municipal, un tiempo aproximado de 3 horas, debido a las condiciones de la carretera.
Flores Ledesma dijo que la facultad no es del gobernador, “sólo puede proponerlo, ya que la facultad legal, la tiene el Congreso del Estado”. Los faculta la Constitución Federal en su artículo 115 fracción I, y el artículo 27 de Ley de Régimen Municipal para el Estado de Baja California.
Explicó a #GatoxLiebre que, si bien, el gobernador del estado puede presentar la iniciativa porque es parte de sus facultades, el procedimiento tiene que partir de los propios diputados locales y es necesario el apoyo de las dos terceras partes de los legisladores.
La ley marca como requisito la solicitud de los ciudadanos vecinos de la demarcación territorial; posteriormente el Congreso del Estado forma una comisión para ver su viabilidad; realizar un plebiscito; contar con la opinión fundada y favorable de los Ayuntamientos afectados.
Al cumplir estos requisitos, se somete a votación en el Congreso y se aprobaría solo por mayoría calificada, es decir, 17 votos de los 25 votos que lo conforman.
Puntualizó que tendría que generarse un procedimiento “fast track” (por la “vía rápida” en inglés). Para sustentar la viabilidad de la municipalización es necesario aportar una serie de información y estudios que involucren aspectos financieros, jurídicos, topográficos, entre otros.
Actualmente San Quintín forma parte de Ensenada y al volverse municipio tendría un impacto en las finanzas municipales de Ensenada, pues se tendrían que adecuar el presupuesto, definir las tazas catastrales e impuestos.
“Ensenada tendrían menos participaciones, sobre todo por el desarrollo agrícola del Valle de San Quintín”, dijo el investigador.
Indicó que, probablemente, primero se forme un Consejo Municipal (como ocurrió en Rosarito), y posteriormente la municipalización formal y la elección de presidente municipal y el cabildo.
Adrián Flores, recordó ya hubo un intento en el periodo del ex gobernador, José Guadalupe Osuna Millán (2012) llegando hasta el plebiscito con la participaron 25 mil 351 personas y la aprobación del Congreso del Estado. Y con todo el ejecutivo lo vetó argumentando no haber condiciones presupuestales para llevar a cabo la municipalización.