Se debe aprender a envejecer: Barajas

La desinformación sobre la vejez y la falta de planes, motivaciones o expectativas suelen crear incertidumbre

  · jueves 24 de mayo de 2018

Juan Miguel Hernández

Tijuana.- La desinformación sobre la vejez y la falta de planes, motivaciones o expectativas suelen crear incertidumbre, tristeza o incluso omitir y restarle importancia a síntomas o signos del deterioro mental y emocional que podrían ser tratados para así conservar la función e independencia en la tercera edad, consideró la directora del Centro de Cuidados de Día Serena Day Care by GeronTropia, Sarai Barajas.

La especialista precisó que el desconocimiento hace vulnerables a los adultos mayores, ya que el deterioro en la función cognitiva es gradual y esperado al envejecer; sin embargo, es importante identificar cuando es normal o es el inicio de una patología neurocognitiva.

“Durante nuestra vida es importante aprender a envejecer. Existen muchas cosas positivas en la adultez tardía. El adulto mayor frecuentemente es capaz de comprender y mejorar las problemáticas comunes de la vida; tiene claro que el afecto es primordial y le da un valor más adecuado a las personas, situaciones y cosas a su alrededor”, agregó.

Recalcó la importancia de que el adulto mayor adopte un papel activo en esta etapa de desarrollo, informarse sobre el envejecimiento; confrontar los estereotipos, tomar acciones al deterioro físico y mental a través de terapias farmacológicas y no farmacológicas adecuadas y confiables ofrecidas por profesionales.


“Esto nos da la certeza de que sí podemos envejecer exitosamente, y que vivir las diferentes etapas nos hace afortunados y especiales”, apuntó.

Por último, señaló que al llegar a la tercera edad, la mayoría de las personas adoptan una actitud pasiva que trae como consecuencia la falta de adaptación del adulto mayor con su propia familia y entorno.

“Aumenta la sensibilidad emocional, el temor a los cambios, la ansiedad y disminución de la autoestima. Si a eso le agregamos problemas económicos o incluso la jubilación, tenemos a un adulto mayor susceptible a sentir que lo agreden; no lo valoran y le restringen actividades”, concluyó.