Tijuana.- El ‘zipizape’ entre manifestantes y elementos de la Guardia Nacional (GN), en la caseta de cuota en Playas de Tijuana, fue culpa de las autoridades federales y no del decreto estatal, según la opinión del gobernador Jaime Bonilla Valdez.
Durante su transmisión vía internet, la tarde de este jueves tras el viaje que realizó a Ciudad de México, lanzó acusaciones; sugirió despedir funcionarios y defendió su decisión de pasar el tramo carretero al estado.
Mostrando la imagen de uno de los manifestantes tirado sin que alguien lo sometiera, calificó como “gansteril” la respuesta de la GN y la acusó de golpear a los manifestantes.
“Miren cómo lo tienen si ni siquiera está armado, cómo lo tiene con esa rudeza y ese coraje”, agregó después junto a la imagen de otro de los detenidos con las manos en lo alto y un oficial detrás de él.
Su respuesta dividió opiniones en los mensajes desde las cuentas que seguían la transmisión vía Facebook, y hubo quienes descalificaron al ejecutivo mientras este intentaba vender un discurso de presunto abuso policiaco.
“Son unos actores, nadie los golpeó, solos se tiraron al suelo. Usted es el culpable” (sic), escribió por ejemplo Francisco Durán.
“Puro grillero, no aga caso gobernador” (sic), publicó después Romualdo Sr García, mientras Bonilla Valdez llamaba cobarde a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), y a la Guardia Nacional.
“Haber señor Gobernador, basta de teatros, que no estamos en broadway, Las carreteras federales no le competen al estado no?” (sic), preguntó en cambio David Peralta.
Pero en el equipo del gobernador no eligieron esa pregunta de entre los mensajes que cuestionaban la actitud del mandatario, sino la de Enrique Cabanillas que lo acusaba de guardar silencio tras el episodio de este lunes mañana.
“Mañana voy a estar aquí, para mi amigo el que decía que calladito, calladito. Mañana voy a estar temprano, así que sintoniza y vas a ver”, dijo apuntando a la lente con el dedo índice después de responderle que no se dejara engañar.
Antes de eso, en tono de orden, había pedido al congreso local enviar un exhorto a la legislatura federal para expropiar la vialidad, y al presidente Andrés Manuel López Obrador le encargó atender el problema surgido a raíz del decreto estatal.
“Yo pido que si no hacen algo rápido, el presidente debe pedir la renuncia del secretario de comunicaciones”, agregó Bonilla Valdez.