Crisstian Villicaña

Tijuana.- Mary Olivas junto a un equipo de voluntarias llevan cerca de una década y media sirviendo alimento, atención y ayuda a niños de padres adictos a las drogas; esta función caritativa está en peligro debido a que este proyecto (Mar de Ilusión) ha dejado de recibir despensas del gobierno, las cuales si bien no eran suficientes, servían para darles un plato de comida a los niños.

Esta situación ha conseguido que cada día sea más difícil alimentarlos; teniendo que estar al día, con la incertidumbre si el día de mañana habrá algunas verduras, tortillas o sopa para los menores de edad.

Se ha puesto muy difícil desde que nos quitaron las despensas; no era mucho, pero venía para hacer sopa, aceite, frijol, harina, cosas que ahora tenemos que comprar y antes nos ahorrábamos, eso nos ha afectado mucho para hacer las comidas de los niños

"Estamos sobreviviendo con las donaciones de personas que vienen y nos traen cosas, pero del gobierno no tenemos ayuda ya; algunos negocios como uno de pollos asados que está aquí cerca nos comparte de lo que sobró, pero no es siempre; estamos en un momento en el que todos los días andamos viendo si hay algo para cocinar", platicó.

De continuar esta problemática se tendrían que ver en la necesidad de cerrar, hecho que significaría tener que dejar sin alimentos a los más de diez niños que a diario desayunan y comen en Mar de Ilusión.

En ese sentido, Mary nos dijo que no desea dejar de lado esta labor, y que por el contrario esperan que alguien los ayude con alimento en especie, y entonces si poder continuar con esta importante labor.