Juan Miguel Hernández
Tijuana.- En 2019 van registradas 60 mil solicitudes de refugio en México, informó el coordinador general de la Comisión Mexicana para ayuda a refugiados (COMAR), Andrés Ramírez Silva.
Durante la conferencia “Características de la nueva ola de refugiados en México”, que se realizó en El Colegio de la Frontera Norte (El Colef), indicó que esta cifra supera los 21 mil 600 del año pasado.
“Es un fenómeno global, se da a nivel mundial, a través de los flujos mixtos, todo está aumentando, hay en todos los ámbitos un incremento del flujo y México está en un lugar importante en recepción de migrantes. En el mundo existe un deterioro de vida, las personas no encuentran capacidad de desarrollo en sus propios países”, comentó.
Ramírez Silva, precisó que del total de solicitudes de asilo, la mitad son de origen hondureño, seguido de las personas provenientes de El Salvador. De igual forma señaló que hay un gran número de cubanos, venezolanos, haitianos y nicaragüenses.
“Una cosa es que las personas extrajeras, solo por el hecho de ser foráneos tienen el derecho de solicitarlo, no hay impedimento para cerrar la puerta a alguien que llega. Eso no quiere decir que se le acepte, porque se le daría la condición de refugiado, sin tener ningún mérito y si lo reconociéramos cometeríamos un error, porque debilitaríamos la credibilidad del propio sistema de refugiados”, puntualizó.
El titular de Comar dio a conocer que el año en curso, igual existe un alza en la cifra de migrantes transnacionales que llegan al país, en búsqueda de alcanzar asilo político en Estados Unidos.
“Predominan los africanos, pero sigue siendo mucho menor, aunque triplica lo que llegó este año de africanos. La mayoría no quiere la condición de refugiado, quiere llegar a Estados Unidos y atravesar el país, son pocos los que desean quedarse en México”, explicó.
Por último, mencionó que la Comar y otras instituciones del gobierno de México, trabajan en mecanismos para buscar que solicitantes de asilo tengan acceso a servicios públicos, durante el proceso de refugio.
“Desde el momento en que están solicitando, tienen derechos, pero el acceso a servicios públicos hay problemas, porque no hay servicios y es importante trabajar para que dependencias les ofrezcan servicios públicos a los solicitantes”, concluyó.
