Juan Miguel Hernández
Tijuana.- El conflicto generado entre Tijuana e Imperial Beach por el derrame de aguas negras tendría que ser resuelto por el gobierno de Estados Unidos ante la gravedad del daño ecológico causado en las aguas norteamericanas.
Lo anterior, lo expuso el director del Centro de Innovación y Gestión Ambiental (CIGA), José Carmelo Zavala, quien dijo que las ciudades de San Diego y Chula Vista también se unieron al reclamo.
“Está subiendo el nivel del tema jurídico. Las ciudades del condado de San Diego están siguiendo el proceso dentro de Estados Unidos, que demandan al gobierno de Estados Unidos que resuelva el tema en una corte internacional. El gobierno federal de Estados Unidos tendrá que recurrir al CILA”, explicó.
El especialista señaló que el Banco de Desarrollo inyectó recursos al organismo operador del agua en Tijuana con el propósito de resolver problemas en la infraestructura hidráulica de la ciudad.
“De lado mexicano, ha habido una reacción ciertamente no suficiente, pero apoyado con el Banco de Desarrollo y la Comisión Ecológica Fronteriza. Han venido fondos que han apoyado con el tema de agua en Tijuana. En el tema ambiental, la colaboración ha sido larga e histórica”, expresó.
Sin embargo, Zavala criticó la ineficiencia por parte de los organismos operadores del agua en Baja California, que operan bajo números rojos debido a la mala administración por parte de los gobiernos locales.
“Está agotada la vida útil de la infraestructura. Este estrés financiero con los que se manejan los organismos operadores es muy difícil, porque no ha sido una administración eficiente. La CESPT se ha vuelto una plataforma política, es componente profesionalizar órganos técnicos de gobierno”, concluyó.