Tijuana.- Con motivo del día Internacional de Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH), el psicólogo del Hospital de Salud Mental, Ricardo Jurado, explicó cuáles son los síntomas, las consecuencias que tiene este padecimiento y cómo tratarlo.

“Por principio es un desorden prevalente en la etapa de neurodesarrollo, y se define por un patrón de conducta que puede ser la inatención, así como conductas relacionadas a la hiperactividad e impulsividad. Hablamos de un déficit en el control de la atención, en el que los pacientes tienen limitada su capacidad para inhibir la atención a estímulos irrelevantes, con limitación a introducir información extra y para generalizar”, explicó.

Jurado indicó cuáles son los síntomas del TDAH, cuando se da un predominio de inatención, y qué consecuencias conllevan para la persona que tiene este trastorno.

“Se observa en la realización de cualquier tarea o ámbito. Cometen fallos, olvidos o descuidos en cualquier actividad. Les cuesta mantener una conversación, seguir instrucciones o realizar una lectura comprensiva prolongada”, mencionó.

Cuando se trata de un Predominio hiperactivo-compulsivo, detalló que la persona afectada presenta excesiva actividad motora en momentos inapropiados, entre otros comportamientos, puntualizó el psicólogo.

“En el Predominio hiperactivo-impulsivo se destaca la impulsividad, que se puede observar en la emisión de conductas verbales o no verbales, sin reflexión. Además se presenta con la incapacidad para demorar la gratificación, que se explica cómo este deseo de seguir nuestro impulso por obtener algo que deseamos, queremos las cosas ya”, puntualizó.

Es importante señalar que no en todas las ocasiones en que un niño muestre hiperactividad o distracción sufre este trastorno, por lo que Ricardo Jurado señaló en qué casos se debe realizar un diagnóstico.

“El diagnóstico sólo debe hacerse si el síndrome está interviniendo visiblemente con el desarrollo social, académico, ocupacional o funcional del paciente (...) Es importante señalar que es uno de los problemas más comunes en la infancia, y su incidencia aproximada es de 5% a 7% para los niños y de 2% a 4% para las niñas”, concluyó.