Laura Bueno Medina
Arturo Carranza Negrete tiene a sus 74 años la batalla personal más grande de su vida, sobrevivir al cáncer, pero como les ha enseñado a sus hijos, todo se puede afrontar con fe, buena cara, y más aún si se tiene el apoyo de la familia.
Este Día del Padre celebrará con sus seis hijos y nueve nietos la vida, que como él dijo, ha sido maravillosa, con sus dificultades, pero al final en unión familiar.
Desde muy joven, Arturo tuvo que sobreponerse al cambio de vida, llegando desde Michoacán hasta Estados Unidos en donde hizo su familia y viven ahora todos sus hijos y descendencia. Arturo trabajó por más de 30 años en la construcción.
A pesar de que la vida es muy diferente en Estados Unidos, Arturo dijo haber vivido muy feliz con su esposa y sus seis hijos, trabajando con mucho esfuerzo para darle a sus hijos una mejor vida de la que él y su esposa les pudieron ofrecer.
Ahora Arturo vive una gran batalla, a casi un año de haber sido diagnosticado con cáncer de próstata, tiempo en el que ha transmitido a sus hijos la necesidad de cuidar de su salud, por lo que debe acudir por lo menos una vez al año a consulta médica.
Nunca se había hecho un examen para evaluar su salud, llegó con el doctor oncólogo Homero Fuentes, con un diagnóstico severo de cáncer, el cual ha sido atacado desde enero de 2019.
Con niveles bajos de cáncer, Arturo tiene seis meses en tratamiento, aquí en Tijuana, después de haber desistido de buscar ayuda en Estados Unidos en donde vivía antes.
En su retiro, dice estar feliz porque pudo regresar a México a vivir tranquilo, a pesar de la lucha contra el cáncer que está viviendo.
“Están mirando que las cosas están saliendo bien”, dijo Arturo, con respecto a sus hijos, que cada día se comunican con él para preguntarle por su estado de salud.
Agregó que está enseñando a sus hijos a dar batalla en caso de alguna enfermedad, para que ellos también que son padres transmitan esa cultura a sus hijos.
Como mensaje final, dijo a los caballeros que es necesario dejar atrás la mala idea de los exámenes médicos, y en particular del cáncer de próstata, porque va de por medio la salud y el poder seguir viendo a los seres queridos.