Daniel Ángel Rubio | El Sol de Tijuana
La reestructuración de la deuda estatal aprobada por el Congreso dará flujo de efectivo a la actual administración, pero aumentará el monto de los pagos que tendrán que hacer las siguientes administraciones.
De acuerdo con el dictamen No. 36 de la Comisión de Hacienda, hubo una reserva para proponer que la deuda se pagara en 15 y no en 20 años para evitarlo, pero los legisladores lo rechazaron.
“Se prevé un flujo de efectivo durante los primeros años y posterior a ellos se pagará más interés y no quedará flujo”, dijo en su reserva el diputado David Ruvalcaba del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Su propuesta, rechazada con 16 votos en contra, 4 abstenciones y tres votos a favor, era que los pagos anuales fueran todos iguales a lo largo del tiempo para que no resultaran perjudicadas las finanzas de los gobiernos que vendrán.
“El monto de los pagos será mayor, pero con esto podemos asegurar flujo de efectivo para las posteriores administraciones”, dijo.
Según los datos que dio el legislador, el monto de los pagos aumentará más del triple para el 2039 en comparación con lo que pagará este gobierno en este primer año de la reestructura.
El dictamen también consignó que más de la mitad de los 24 préstamos que componen la deuda de 12 mil 320 millones 395 mil 241 pesos fueron compromisos adquiridos por el gobierno anterior.
Los 13 créditos que obtuvo la administración del ex gobernador Francisco Vega de Lamadrid representaban 7 mil 123 millones 409 mil 423 pesos para finales del mes de septiembre, dicen las cifras incluidas en el dictamen de la comisión de hacienda.