Tijuana.- Los comerciantes que se dedican a la venta de uniformes no esperan una franca recuperación para el inicio del ciclo escolar 2021-2022, debido a la incertidumbre que hay entre los padres por el regreso a clases presenciales.
En la zona Centro, una de las más concurridas, son pocos los padres de familia que se pueden apreciar en las tiendas de uniformes escolares, haciendo las compras necesarias.
Este año, debido a la economía, se espera que solo se compre lo esencial por parte de las familias.
En promedio, una familia realiza una inversión de más de dos mil pesos por hijo en uniformes escolares tanto el normal como el deportivo, a lo que se suma el calzado para ambos uniformes.
Entre la difícil economía que atraviesan la mayoría de las familias y la decisión de no llevar a sus hijos aún a las escuelas por el miedo a un contagio de Covid-19, los comerciantes no auguran buenas ventas como tradicionalmente ocurría en esta temporada del año, antes de la pandemia.
Óscar Fernández, vendedor en la zona Centro, mencionó que la venta “ha estado muy tranquila, unos cinco o siete conjuntos al día hemos vendido”, cuando en años pasados las ventas superaban los 20 conjuntos diariamente.
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Las dos semanas previas al inicio de clases de cada año representan para este comercio la mejor época de ventas, lo cual lamentablemente no se ha reflejado en este 2021, quedando solo una semana para el retorno a clases.
La Secretaría de Educación ha hecho recomendaciones a las escuelas, de ser tolerantes con la fecha de obligatoriedad para cumplir con el uniforme escolar, tomando en cuenta la economía de las familias y que no todas las escuelas regresarán a las aulas al mismo tiempo. Cabe mencionar que a nivel nacional, la SEP y el SNTE notificaron en junio que los uniformes no serían obligatorios en el primer bimestre de regreso a clases presenciales.