Tijuana.- Raúl Orlando Calix Pineda, un veterano de guerra originario de Honduras que sirvió en la Marina de Estados Unidos, cruzó este martes 19 de diciembre por la garita de San Ysidro después de haber sido deportado hace 18 años al recibir un permiso humanitario por un año.

“(Estoy) muy contento, muy alegre que al fin voy a pasar tiempo con la familia los días de vacaciones, los cumpleaños, me siento muy contento de nuevo poder regresar a Estados Unidos”, contó.

Calix Pineda fue deportado a Honduras en 2005 luego de ser denunciado por un supuesto fraude a la aseguranza médica, en el 2010 se trasladó a Playas de Rosarito para estar más cerca de la frontera y poder ser visitado por sus familiares.

Raúl Orlando llegó a Estados Unidos en 1969 a la edad de 12 años y cruzó de manera irregular con su mamá y cuatro hermanos.

Entre 1980 y 1987, formó parte de la Marina, en donde fungió como reserva en la base naval de California.

“Nunca creí que alguien que ha servido a su país lo iban a deportar por cualquier cosa que uno haga, así que fue una sorpresa para mí”, declaró.

ACCEDE A NUESTRA EDICIÓN DIGITAL ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!

El veterano, acompañado por su esposa María y su hija mayor Irene, dijo que el resto de sus hermanos y familia lo esperan en su casa de Los Ángeles para pasar la navidad juntos.

Además de pasar la temporada navideña con hijos y nietos, comentó sentirse feliz de reunirse con su mamá quien está por cumplir 90 años y una de sus hermanas que padece cáncer.

“Durante el proceso que estuve afuera dos de mis hermanos fallecieron, así que era triste no poder estar en el entierro con la familia, aunque en ese tiempo traté de venir y me lo negaron hasta ahora, por eso este parole humanitaria es por eso, para estar con mi hermana”, declaró.

Héctor Barajas Barrera, director de la Casa de los Veteranos Deportados en Tijuana, detalló que en el último año 80 personas han obtenido un parole humanitario, de alrededor de 400 veteranos que están en lista de espera.