Uriel Saucedo

Tijuana.- Aun cuando la propuesta de un modelo de mando único podría ser viable y tener buenos resultados, el camino para concretarlo podría ser complejo, sobre todo porque existen algunas cuestiones que deben quedar listas previamente, como lo es tener un presupuesto adecuado y se tenga establecido la situación de la Ley de Seguridad Interior, que está por votarse, indicó el doctor José María Ramos.

“Puede ser una alternativa de política pública para generar una menor incidencia delictiva, sobre todo tomando en cuenta la incidencia delictiva producto del fuero común y del fuero federal. El problema de esto es que tenemos pendiente una Ley de Seguridad Interior que está por ser votada, ya que en esta propuesta -de mando único- no está claro quién va a tener el papel central; si van a ser las fuerzas armadas, la policía federal, la marina o las policías estatales”, indicó.

Ejemplificó que, a nivel internacional, existen ejemplos en donde las colaboraciones entre corporaciones han dado buenos resultados, pero añadió que, en el país, aún existen necesidades y retos que requieren una solución, ya que las policías estatales y municipales, aun cuando tuvieron designado presupuesto, no dieron los resultados esperados, y la coordinación con el gobierno federal generó deficiencias.

De igual manera, con respecto al tema de la policía fronteriza, opinó que no se necesita necesariamente crear nuevas estructuras, sino enfocarse en la forma en que van a operar, la eficacia que puedan tener, así como su desempeño y los incentivos que puedan tener para evitar que se involucren en temas de corrupción.

Asimismo, dejó en claro que el modelo de mando único sí puede ser la mejor alternativa, y recordó que, hace 10 años, en la ciudad de Tijuana, se pudo observar que funcionó la coordinación entre las fuerzas armadas y la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM).

Sin embargo, dejó algunas dudas al aire, como saber si se dará recurso, que no se ha dado en los últimos dos años, así como si van a existir políticas eficaces preventivas transversales que se vinculen con el papel de nuevos policías, como son el policía de proximidad o el policía vinculado con su comunidad.

Por otra parte, señaló que uno de los retos para la nueva administración es que se pueda comenzar a trabajar a partir de las policías municipales y estatales, pero también, con la policía federal, la cual no se ha comprometido, a pesar de los enormes recursos que se han dado para esta corporación.