Daniel Ángel Rubio
Tijuana.- Los incendios que se registraron en cuatro de los cinco municipios del estado dejaron muertos, heridos y a decenas de familias sin vivienda, de acuerdo con el conteo preliminar de autoridades municipales y estatales.
“Es la condición de incendios por fenómeno Santa Ana más fuerte que ha impactado en la historia de Baja California por la cantidad de municipios afectados, de viviendas afectadas y las personas que han fallecido”, afirmó Antonio Rosquillas Navarro, director de Protección Civil del estado.
Además lo consideró un indicio del cambio climático que vive esta parte norte de la península, donde fue necesario el trabajo no solo de bomberos, sino también de las fuerzas armadas, Guardia Nacional y voluntarios.
Los municipios que reportaron afectaciones fueron Tijuana, Ensenada, Playas de Rosarito donde se registró un deceso, y Tecate, que tuvo dos muertes más.
José Manuel González, representante de Playas de Rosarito dijo que el Ayuntamiento declaró emergencia luego de atender seis incendios en una noche.
Incluso la ciudad de Tijuana tuvo que apoyar con personal de bomberos a ese municipio que habilitó tres albergues, agregó.
“Está Rosarito en un momento de mucha necesidad (…) queremos hacerle frente, sin embargo la falta de recurso…tenemos dos meses como ayuntamiento que no recibimos una aportación del gobierno del estado”, dijo el representante del municipio al gobernador Francisco Vega presente en la mesa.
Los incendios también provocaron el cierre de las carreteras libres y de cuota que llevan al municipio de Ensenada, quien por su cuenta reportó el incendio de alrededor de un centenar de viviendas.
Por otro lado, el representante del gobierno tijuanense informó que en un lapso de 24 horas contaron tres mil 500 hectáreas y más de 50 casas afectadas por el fuego, pero sin lesionados.
“Hay varios, decenas de incendios activos pero aislados, controlables”, aseguró el representante del gobierno local.
El último de los gobiernos que dio a conocer los datos preliminares de afectaciones fue Tecate, la ciudad que albergó la conferencia de prensa y la instalación del Consejo Estatal de Protección Civil.
Zulema Adamas, la alcaldesa, dijo que una de las dos muertes que tuvieron fue la de un elemento de bomberos en la zona rural de la ciudad, y fue necesario evacuar tres colonias con más de cien casas afectadas.
“No hemos combatido un incendio cuando tenemos otro (…) se nos están descomponiendo las bomberas, ya nos tronaron unas”, afirmó.
Francisco Rueda, secretario General de Gobierno en el estado, dijo que con la instalación del Consejo Estatal de Protección Civil, el siguiente paso sería la declaratoria de emergencia.
“Lo más importante es atender la contingencia operativa, es decir combatir el fuego”, añadió el funcionario mientras en el estado de acuerdo con Protección Civil de Baja California, había alrededor de ocho frentes de distinta magnitud por atender.
De acuerdo con su titular Rosquillas Navarro, otra diferencia con incendios registrados en años anteriores por la condición Santa Ana fue la cercanía con zonas urbanas.
Agregó que Tecate registró incendios desde la semana pasada, pero la emergencia que generó la instalación del Consejo Estatal de Protección Civil ayer inició el jueves a las ocho de la mañana.
“Conafor nos indicó que empezó un incendio a la altura de San José de la Zorra que es un comunidad Kumiai muy cercano a Valle de Guadalupe, y que después se desató todo”, respondió.
Entrevistado al terminar la conferencia de prensa, dijo que ya estaban preparando la Declaratoria de emergencia para enviar al gobierno federal y así tener acceso a recursos principalmente para ayudar a los damnificados.
Sin embargo, destacó, esto llevará un tiempo y además hay que seguir lineamientos federales para recibir el apoyo que permita a las familias levantar nuevamente su hogar.
El Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden), sería una opción pero los damnificados deben ser considerados en el marco de pobreza extrema y ser propietarios del terreno donde tenían su casa, explicó.
Por último, comentó que los pronósticos climatológicos indicaban que este mismo viernes disminuiría la velocidad del viento, pero el pronóstico podía cambiar.