Karina Torres
Tijuana.- La mañana del viernes entró en funciones el segundo albergue que dará atención a los migrantes que se encontraban pernoctando sobre la calle 5 de Mayo a un costado de la unidad deportiva Benito Juárez, en la zona centro de la ciudad.
La bodega, ubicada a media cuadra del recinto deportivo, cuenta con una superficie de tres mil 800 metros cuadrados y dará cabida a 600 migrantes, entre hombres, mujeres y niños, explicó Celeo Archaga, pastor hondureño que llegó con la caravana migrante a la ciudad.
También te puede interesar: Situación migratoria sigue sin resolverse
"Los primeros que venimos para acá somos los coordinadores y empezamos porque va a ser de 10 en 10 porque necesitamos registrarlos que no traigan armas blancas, que no traigan drogas, que no traigan nada y que todos los que traigan es de propiedad de ellos; entonces, va a haber un orden de entrada”, afirmó el pastor Archaga.
Afirmó que este nuevo espacio se logró a través de las gestiones del delegado federal Jaime Bonilla, y serán los migrantes censados por padre Solalinde quienes podrán ingresar, más un aproximado de 100 migrantes que decidieron retornar del albergue habilitado en el centro de espectáculos “El Barretal”.
En este nuevo espacio, contarán con los servicios básicos y podrán permanecer bajo techo ante el pronóstico de bajas temperaturas y condiciones extremas características de esta temporada invernal. Archaga, quien se dijo que es uno de los seis coordinadores que estarán apoyando en el nuevo refugio, ubicado sobre la calle Fernando Sánchez Ayala, explicó que contarán con reglas para quienes decidan permanecer en el nuevo albergue mientras realizan sus trámites y regularizan su situación en la región.
“Son reglas básicas de respetar el edificio, no dañar la propiedad privada y otras cosas, como no salir después de las 11 de la noche, no andar en la calle nadie y no permitir sonidos estridentes acá porque, la verdad, somos inmigrantes y no andamos de fiesta, andamos en una lucha y creo que hay que respetar a los demás”, afirmó.
En grupos de 10 personas, los migrantes comenzaron a ingresar al nuevo espacio, mientras trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad realizaban los últimos ajustes para brindar el servicio de energía eléctrica. La bodega cuenta con seis baños portátiles a las afueras de la misma y dos lavatorios portátiles que las personas podrán utilizar durante su estadía en el espacio.
Lo migrantes fueron invitados a trasladarse a 150 metros de la unidad deportiva Benito Juárez para su seguridad y resguardo, prevenir que infantes y adultos se enfermen, etc. Algunos se negaron a la alternativa ofrecida por la Policía Federal presente en el lugar.