Tijuana.-La señora Eréndira tiene más de 30 años trabajando en la Línea Internacional, labor por la cual ha logrado sacar adelante a su familia. El “boicot” promovido a los vendedores del cruce internacional, dice que le parece injusto, pues hay trabajadores que no afectan a los ciudadanos que buscan cruzar hacia Estados Unidos.

“Cada quien está en su derecho, lo que molesta un poco es que nos generalicen a todos. No nos pueden juzgar a la ligera y a todos por igual, habemos personas que venimos a trabajar. Mi familia de aquí vive, no todos somos malandros”, manifestó.

La vendedora de jugos, asegura que ella como otros tantos comerciantes, tratan bien a los clientes, por lo que le parece injusto que a todos se les ponga en el mismo “costal”.

“A nosotros no nos corresponde sacar a los malandros. Aquí han pasado muchas cosas y nadie dice nada, yo hablo por mí y mi familia y tratamos de cuidarnos a nosotros”, comentó.

El Sol de Tijuana hizo un recorrido en la garita Internacional de San Ysidro, en donde constató la presencia de la Guardia Nacional en la zona, tras los incidentes ocurridos la semana en los límites entre México y Estados Unidos.

Don Salvador Castañeda es un usuario frecuente de la garita de San Ysidro, señala que siempre trata de comprar a los vendedores ambulantes, pero un día que se negó a hacerlo, le golpearon su automóvil sin motivo alguno.

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“Por una parte está bien y otra mal, pagan justo por pecadores. Abusaron de esa persona. En lugar de que los vendedores nos cuiden de los malandros. Yo siempre apoyo y doy a todos, pero ahora debo de apoyar”, dijo sobre el boicot.

Cabe mencionar que el movimiento “Ni un Dólar Más” fue promovido a través de las redes sociales, esto después de que un automovilista fue golpeado tras correr el rumor de que había atropellado a un niño.