[VIDEO] Sin certeza, abasto de agua en verano

El servicio con interrupciones ha sido un problema constante en colonias periféricas de Tijuana

Ana Lilia Ramírez | El Sol de Tijuana

  · domingo 11 de abril de 2021

El nivel de agua en la presa El Carrizo, ubicada en los límites de Tijuana y Tecate, está por debajo del 60%. La apuesta de la Secretaría para el Manejo, Saneamiento y Protección del Agua este verano es sacar agua de los pozos. Foto: Daniel Ángel Rubio | El Sol de Tijuana

El “fantasma” del tandeo para este verano no deja de rondar a la ciudad de Tijuana, aunque las autoridades encargadas del abasto dicen que trabajan para que esa medida no sea necesaria.

El problema hoy es que la ciudad no tiene el agua suficiente en la presa El Carrizo, y especialistas subrayan que sigue sin haber un plan de fondo para garantizar el servicio sin interrupciones.

El mismo secretario para el Manejo, Saneamiento y Protección del Agua (Seproa), Salomón Faz Apodaca, dice que el nivel de almacenamiento es bueno, pero no es suficiente.

La presa El Carrizo, ubicada en los límites de Tijuana y Tecate, se encuentra al 58% de su capacidad, de acuerdo con el Sistema Nacional de Información del Agua Monitoreo de las Principales Presas de México.

Salomón Faz admite que con eso no será posible que todos los hogares tengan agua sin contratiempos durante la temporada de calor, aunque sostienen públicamente que no habrá suspensiones.

“Eso ya lo anunciamos, y estamos haciendo otras cosas como mejorar 15 a 20 pozos, rehabilitar pozos nuevos, porque otra cosa es que se abandonó la extracción de agua del subsuelo en Tijuana”, comentó.

La escasez no alcanzaría niveles críticos este año. Foto: Carlos Luna | El Sol de Tijuana

De esa manera, de acuerdo con el director de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT), podrían “inyectar al sistema” unos 300 litros/segundo.

“Es más o menos el déficit que se tiene en el verano. Se puede incrementar un poquito más, pero hay acciones que se están generando hacia el lado de la presa El Carrizo, incrementar la capacidad de conducción del acueducto de El Carrizo a la potabilizadora El Florido”, comentó Eliel Vargas, director de la paraestatal.

Faz Apodaca dijo también que la temporada de frío que se está despidiendo es otro aliado porque el consumo de agua en la ciudad desciende.

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Y a la par prevén alcanzar mejores niveles de almacenamiento con las lluvias que puedan caer en estas últimas semanas.

“Sube todos los días de uno a dos centímetros y la estamos subiendo lentamente para llegar a la altura máxima el verano. En el verano tenemos que estar extrayendo cinco mil 500 litros, ahora el máximo es cuatro (mil litros)”, explicó el secretario del ramo.

La Secretaría del Agua dijo que prepara infraestructura hídrica para no tener pausas al servicio, y asegura que la extracción del subsuelo ha dado buenos resultados.

“Todas las experiencias de perforaciones recientes han dado más agua de la esperada. ¿Qué fue lo que pasó? Que se confiaron de que todo viniera de Mexicali y el acueducto diera todo”, aseguró.

Foto: Carlos Luna | El Sol de Tijuana

El detalle es que en los acuerdos para distribuir el agua que viene del Río Colorado a Baja California, alrededor del 80% se queda en Mexicali por ser una zona agrícola, y el resto se envía a la Zona Costa, donde cada vez hay más demanda.

“No deja de crecer no solamente por el incremento de la población, sino que la pandemia nos está demandando hasta 300 y 400 litros adicionales a los años anteriores”, apuntó.

Según Faz Apodaca, invertir en los pozos es la alternativa más económica en lugar de traer agua de Mexicali, mientras que desalar agua de mar tampoco es opción para Baja California.

“Es el agua más cara, como le pasa a Ensenada. Vale 28 pesos el metro cúbico, cuando la tarifa media es 19. O sea, cada metro cúbico que sacamos en Ensenada de la desaladora, no lo cobramos completo, porque el costo es muy alto en ese lado, pero en los pozos anda en seis pesos y el acueducto vale 12 de pura energía”, comparó.


NO HAY ESTRATEGIA: ESPECIALISTA

Alfonso Cortez Lara, investigador del Colegio de la Frontera Norte (Colef), mencionó que para sortear la escasez de agua potable en verano el almacenamiento en la presa El Carrizo debe estar por arriba del 65%.

“En otros años ha estado en una capacidad del 30%. Se necesita mantener un volumen elevado en el vaso de la presa. 50% es bueno, pero no tan bueno, no hay que estar en esas líneas de riesgo”, subrayó.

Incluso consideró que de llegar al verano con un almacenamiento por debajo del 60%, como pasa en este momento, es alta la posibilidad de que haya desabasto como ha ocurrido en otros años.

Su expectativa para superar el nivel de almacenamiento actual, igual que el de los funcionarios de gobierno, es que en las siguientes semanas caiga algo más de lluvia.

“Parece ser que este año es más benévolo que el anterior, nada más hay que esperar que no se modifique la condición meteorológica o climática”, agregó.

Y aunque el especialista en temas hídricos consideró que este año la escasez podría no ser una situación que alcance niveles críticos, lamentó que la apuesta de los gobiernos siempre esté ligada al azar de la temporada de lluvia.

Ciudadanos han optado por almacenar agua en colonias periféricas. Foto: Carlos Luna | El Sol de Tijuana

“Seproa debe prever programas y estrategias de largo plazo, porque esto lo estamos viendo de manera recurrente en los últimos años”, subrayó Cortez Lara.

Mencionó que Tijuana cuenta con 12 pozos activos que se deben modernizar para aprovechar el agua, y en ese tema le da la razón a las autoridades: es una de las fuentes más económicas.

Otra alternativa, agregó, es el aprovechamiento de aguas residuales tratadas, porque en la ciudad 93% de ellas terminan simplemente yéndose al mar.

Sumado a esas dos estrategias, el gobierno estatal tiene que buscar un mecanismo que reduzca el consumo, porque Tijuana tiene el costo más alto del estado: entre 28 a 30 pesos el metro cúbico, mientras que Mexicali lo paga a ocho pesos, comparó.


EN LA PERIFERIA SIEMPRE HAY TANDEO

Foto: Carlos Luna | El Sol de Tijuana

Mucho antes de que comenzaran los tandeos por parte de la CESPT, el abasto de agua ya era un problema en las colonias periféricas de Tijuana.

Las colonias Parajes del Valle, Villas del Campo, Valle Las Palmas y Valle San Pedro tienen años enfrentando ese suministro deficiente.

Los residentes dicen que en ocasiones la falta de agua se prolonga por varios días.

Mariana Sanabria vive desde hace 13 años en la calle Del Cóndor, en la colonia Villas del Campo, y dice que la situación empeoró en los últimos cuatro años.

“Nos cortan el agua uno o dos días a la semana, pero a los de la colonia Parajes del Valle se les va el agua hasta por una semana. Llamamos a la CESPT y nos dicen que no tienen reportes”, contó.

Autoridades piden a la población que cuiden el agua. Foto: Carlos Luna | El Sol de Tijuana

En cambio, señaló, los recibos para pagar por el servicio no solo no dejan de llegar, sino que paradójicamente ahora llegan con cobros más altos.

“Antes me llegaban recibos del agua de 98 pesos, y de la nada ahora me llegan 400 pesos, y eso que vivo sola. A partir de octubre del año pasado me subió, pero todo el día no estoy y muchas veces estoy sin agua. Pero a los vecinos les llega de hasta dos mil pesos, sin agua”, aseguró.

Como la vivienda de Mariana Sanabria, hay alrededor de 10 mil más que tienen problemas con el abasto solo en las colonias Villas del Campo y Parajes del Valle.

Su historia es conocida: desarrolladores de vivienda como URBI, responsables de varias de esas colonias, se declararon en bancarrota, dejaron fraccionamientos inconclusos y no los entregaron al municipio para que reciban los servicios públicos.

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La falta de agua potable en esas colonias no tiene que ver con el almacenaje de la presa El Carrizo, sino con la falta de tanques de almacenamiento y tuberías para la distribución, indicó el secretario Salomón Faz Apodaca.

Así que en esa parte de Tijuana han tenido que acostumbrarse a vivir con la escasez, y en el resto de la ciudad el problema es cada vez más frecuente.