Crisstian Villicaña
Tijuana.- El arzobispo de la ciudad, Francisco Moreno Barrón, señaló que la violencia que se vive en la ciudad no es ajena a la Iglesia, tal y como ocurriera con el el padre, Ícmar Arturo Orta, quien fuera ejecutado en Playas de Rosarito hace poco más de diez días.
"Somos más conscientes que somos parte de una sociedad que sufre violencia y que debemos nosotros cuidarnos, pero también solidarizarnos para encontrar condiciones de seguridad para todos en las diferentes comunidades donde estamos presentes".
Acerca de si han tenido acercamientos con representantes de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, comentó: "Nosotros hemos estado en contacto con ellos; sin embargo, esta va ser una tarea constante, porque sucede un incidente y otro y otro, y necesitamos no solo estar alertas, sino, como he insistido tantas veces, buscar la manera de unir esfuerzos, porque aisladamente somos muy frágiles frente a la delincuencia".
Al cuestionarle si han sido víctimas de amenazas miembros de la Iglesia, agregó. "No, absolutamente no, pero en realidad no hay ningún dato, ningún hecho que nos haga como pensar que estamos en una condición distinta que los demás. Somos parte de la sociedad, estamos sufriendo como ustedes, como las familias, como nuestros vecinos, como toda la comunidad".
En lo que refiere al elevado número de muertes violentas, las cuales ya superar las dos mil pese a que el alcalde de la ciudad, Juan Manuel Gastélum, lo niegue, dijo que hay que ver más allá de las cifras y comprender que la vida es valiosa no importando si es sólo una o miles.