Karina Torres
Representantes de la asociación civil AGAPE en Tijuana denunciaron la falta de un protocolo de atención a menores de edad no acompañados en el Hospital General de Tijuana, así como el atropellamiento al derecho a la atención médica y la salud reproductiva de Milagros, una joven migrante de 15 años no acompañada, que se encuentra internada en el nosocomio de la ciudad desde el pasado viernes 7 de junio, cuando inició con dolores de parto.
Alberto Rivera Colón, presidente de la asociación AGAPE indicó que desde hace cinco meses la joven migrante llegó, con cuatro meses de embarazo en aquel entonces. Sin embargo, denunció que la falta de coordinación de las autoridades del Sistema DIF en Baja California y el Instituto Nacional de Migración, ha dejado en un limbo a los menores no acompañados, sin la atención necesaria durante su estadía en esta región fronteriza.
“Cuando le llegan los dolores de parto la llevamos al Hospital General y lo que nos dijeron es que para atenderla que normalmente lo que se hace es que alguien tiene que firmar para que le pongan algo que ellos le llaman “un chip” pero viene siendo para no tener bebés, que viene a ser de tres a cinco años. Me dicen tienes que firmar un documento para que nosotros se lo pongamos”, explicó Rivera Colón.
Sin embargo, afirmó no sentirse con el derecho de tomar una decisión personal con relación a la salud de la menor, pero asegura fue forzado a firmar para que la joven madre fuera atendida. “Para atender a la muchacha, estaba llorando porque estaba con los dolores de parto, pues yo no sentí que había ninguna otra alternativa y firme y puse estoy de acuerdo con lo que diga la menor de edad y tuve que firmar. Me sentí muy mal porque no me sentí con ese derecho. No existe un protocolo meramente, necesitaba pedirme mis credenciales (…) no me pudieron mis credenciales no sacaron fotocopia de mis documentos”, denunció.
De inmediato los representantes de la organización presentaron una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), con quienes han comenzado a trabajar para que la menor reciba la atención adecuada, sin condicionantes, explicó Alberto Rivera.
Por su parte, Carlos Flores Domínguez, presidente interino de la Comisión Estatal, indicó que al momento se encuentran investigando la queja de la organización. Al tratarse de una menor no acompañada, se informó a la Procuraduría para la Defensa del Menor, dependiente del Sistema DIF en la entidad.
PADRE, DETENIDO EN TAPACHULA
Milagros llegó junto a su hermana de 13 años al albergue AGAPE hace cinco meses. Ambas salieron de El Salvador junto a su padre, Manuel de Jesús Enríquez por problemas personales. Su intención era alcanzar el vecino estado del norte en donde solicitarían asilo, sin embargo, en el trayecto de la República Mexicana se separaron. El padre de las menores logró cruzar a los Estados Unidos sin embargo fue deportado a su país de origen lo que retrasó su reencuentro.
Fue apenas la mañana del lunes 10 de junio, que Don Manuel logró llegar a Tijuana, con apoyo de los representantes de AGAPE para poder reencontrase con su hija y lograr la den de alta del nosocomio.
“Yo estaba arreglando mis papeles allá en la COMAR (Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados), en Tapachula, pero por la emergencia que tuve, tuve que dejar mi caso porque ellas son importantes para mí, ellas son mis hijas. Yo les di la autoridad para que ellos (AGAPE) pudieran ayudarme en todo eso, pero espero que todo continúe bien y me puedan oír a mí como padre de familia que soy y me puedan dar la oportunidad de darla de alta lo más pronto que ella pueda”, expresó.
Aseguraron que pese a la denuncia y pronta atención de la Comisión de Derechos Humanos, el método anticonceptivo le fue colocado a la menor, por lo que también buscarán que sea retirado, en caso de que sea la voluntad de la joven.
Desde el pasado viernes 7 de junio, la menor Milagros ingresó al Hospital General de Tijuana en labor de parto